España
| Tercera Información | 22-11-2013 |
LA
IZQUIERDA asiste perpleja a un episodio más de la obsoleta imagen pública de la
iglesia católica española, concretamente el protagonizado por el capellán
falangista de León, Jesús Calvo, que compadeció en directo en una cadena
televisiva de ámbito estatal (LAS MAÑANAS DE CUATRO) y, ante el asombro general
tanto del entrevistador como del resto de televidentes, hizo gala de una imagen
lamentable, regresiva y patética en los tiempos que corren: camisa falangista y
de fondo un collage, con imágenes de Franco, Tejero (el golpista), etc.
Este
capellán falangista, en el citado programa y sin ningún pudor, defendió a capa
y espada la idoneidad de un régimen fascista, como el que sufrió el Estado
español a manos del golpista general Franco; el cual no dudo en asesinar,
torturar, y encarcelar a cualquiera que no compartiera sus tesis.
LA
IZQUIERDA recuerda al capellán Calvo y a Rouco Valela, como máximo dirigente de
la Conferencia episcopal, que el franquismo, SECUESTRÓ LA DEMOCRACIA, LA
LIBERTAD DE PENSAMIENTO Y DE IDEAS, USANDO LA VIOLENCIA, EL MIEDO Y LA
REPRESION COMO "MODUS OPERANDI", DE CONTROL SOCIAL, durante 4 largas
décadas.
Si
los miembros de la iglesia católica se siguen expresando en estos términos,
pues el cura falangista Jesús Calvo dice públicamente: “Tengo el respaldo de
Rouco”, el peligro de adoctrinar a la juventud como pretende el ministro Wert,
incluyendo la religión católica en los currículos oficiales, nos obliga a LA
IZQUIERDA a advertir del peligro que puede conllevar el entrar a los templos,
donde, más que educar en una fe que pregona el amor a los demás, se fomenta una
educación hacia el odio, la violencia, la homofobia, o la tiranocracia; como
así han expresado públicamente sujetos como Jesús Calvo.
LA
IZQUIERDA lamenta la decadencia de los miembros de la comunidad eclesiástica
que protagonizan lamentables episodios de escándalo público, como este que se
ha vivido en el programa televisivo LAS MAÑANAS DE CUATRO.
LA
IZQUIERDA denuncia públicamente la violación de la memoria de los españoles
demócratas desaparecidos y fallecidos; así como el desprecio hacia sus
parientes y descendientes por parte de este individuo, que escudado en su
sotana, rescata y reaviva el odio y la violencia entre conciudadanos en
momentos en los que la sociedad demanda lo contrario; esto es, respeto,
cooperación y consenso entre diferentes posturas para llegar a una convivencia óptima.
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