Paco Arenas
26de noviembre de 2013
Parece ser
que la Iglesia quiere recuperar "El manual de la buena
esposa" puesto en circulación por
las autoridades franquistas en 1953
No debe ser
casual, pero cada vez la que la mujer alcanza cotas de libertad que poco a poco
la va equiparando a la del hombre, Siempre hay alguien empeñado en volver a
tiempos pasados, cuando la mujer era poco más que una propiedad del hombre.
Siempre nos encontramos con un reaccionario legislador que quiere decidir sobre
el cuerpo de la mujer, como si fuese una propiedad pública y la mujer no
tuviese nada que ver con ella misma. Caso del muy reaccionario y misógino
gobierno del actual Reino de España, que pretende legislar contra la mujer, en
algo que le concierne tan solo a ella, como es el derecho a una maternidad
libre y sin imposiciones. No es de extrañar que ese mismo gobierno diga que la
infanta es tonta y no se enteraba de lo que hacía su marido, como tampoco se
enteraba otra ministra de nombre Ana Mato, que también debe ser tonta, aunque
pienso que ambas lo que son más espabiladas de la cuenta. Las mujeres deben ser
libres y responsables de todo aquello que les concierne sin que nadie decida
por ellas. Otra institución que pretende poner a la mujer varios escalones por
debajo del hombre, es la Iglesia Católica. La editorial que preside el
arzobispo Javier Martínez lanza un libro que da las claves a las mujeres para
ser "obedientes, leales, generosas...y siempre colocarse debajo", una
especie de manual de la buena esposa.
Por solo 16€
puedes convertirte en una esposa sumisa, de la editorial Nuevo Inicio. Al igual
que el manual franquista, basa todo en la obediencia y sumisión al hombre,
curiosamente está escrito por una mujer, la periodista Costanza Miriano,
“casada, madre de una familia numerosa y sumisa”, y en él se cuestiona“qué
viene después del beso final de los cuentos y películas”, según la descripción
de la editorial.
“¿Qué viene
después del beso final de las películas? “¿Qué viene después del beso final?
¿Después del “the end”? ¡Sería estupendo que los guionistas dijeran algo! ¿Son
felices? ¿Cuántos hijos tienen? ¿Alguna sabe que se puede ser feliz incluso con
su marido? Ahora es el momento de aprender la obediencia leal y generosa, la
sumisión. Y, entre nosotras, podemos decirlo: debajo siempre se coloca el que
es más sólido y resistente, porque quien está debajo sostiene el mundo”.
“Cásate y sé
sumisa” La autora califica su libro “como una experiencia radical para mujeres
sin miedo” y defiende todo aquello de lo cual debe huir la mujer, la sumisión,
ya sea en el matrimonio o fuera del mismo. Para ella, al igual que en el manual
franquista, el hombre es la autoridad, la mujer la hospitalidad y el servicio.
El Arzobispado de Granada piensa que es necesario un cambio del modelo en la
relación de pareja y avanzar hacia otro fundamentado en el servicio y la
sumisión, donde el hombre como patriarca pueda decidir sobre la mujer, como un
objeto de su propiedad. “El hombre debe encarnar la guía, la regla, la
autoridad. La mujer debe salir de la lógica de la emancipación y abrazar con
júbilo el rol de la hospitalidad y del servicio”.
Hoy en día, ni tan siquiera mujeres
conservadoras y católicas aceptarían algo tan retrogrado y machista como lo que
promulga ese libro, que nadie es más que nadie, sea del sexo que sea, raza o
creencia. Eso debería tenerlo muy claro la iglesia y el muy reaccionario
gobierno del Reino de España, pretender que tanto una como el otro lo
comprendan sería pedir peras al olmo
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