Generación “Open Mind
Artículos de
Opinión | Níkolas Stolpkin * | 24-12-2012 |
Una de las
particularidades del Capitalismo es que constantemente necesita abrir nuevos
Mercados y encontrar nuevas “oportunidades” para ampliar y seguir ampliando los
márgenes de ganancia o “utilidades” del club de privilegiados, no discriminando
el lugar donde pudiera encontrar esas “oportunidades”.
Cada producto
es exprimido hasta la última gota y substituido por otro con nuevas
“características”, “aplicaciones”, “tecnologías”, etc. La idea es poder
mantener a los consumidores constantemente “fascinados”.
Los altares
de la “Moda” reflejan la dinámica cultural de la substitución. Estos, por lo
general, los dirigen una especie de “club sacerdotal” en países
“desarrollados”, quienes han de definir los caminos a seguir, creándose caminos
para todos los “gustos” y “condiciones económicas”.
El vestuario
y las nuevas tecnologías grafican en parte el desarrollo de nuestra cultura del
consumismo.
El Cine y la
Televisión (vitrinas del consumo) son las plataformas ideales para convencer a
esos futuros consumidores de que lo que está usando ya dejó de estar a la
“Moda” y de que se debe “actualizar” o “evolucionar”.
No en vano
te habrán de poner frente a tus ojos el uso de tal o cual herramienta, como
queriendo demostrar “actualización” (ej: presentadores de noticias de TV junto
con el “notebook” o usando algún “Tablet” o celulares (móviles) “touch”, y la
mayoría de las veces no obviando las marcas).
El desfile
de nuevas tecnologías, tanto en el cine como en la televisión, se hace presente
de manera inocente, como dando a entender de que ellos están a la par con los
“nuevos tiempos” y, al mismo tiempo, envían un mensaje a los receptores: “lo
usado por ti ya está fuera de tiempo. Actualízate. Evoluciona. Sé como
nosotros. No te quedes atrás.”
Conforme
entran las nuevas tecnologías, entran nuevas modas y costumbres.
Poco a poco
la cultura de lo que llaman “globalización, y que muy bien podríamos definir
como la “americanización”, penetran en nuestras culturas, adquiriendo nuevas
costumbres o hábitos y adoptando nuevos códigos de comportamiento.
Lo anterior
ha permitido tener en sociedades “conservadoras” una opinión pública más
“abierta” y tolerante a ciertos temas que en otras oportunidades eran
difícilmente tocados.
Es así como
en ciertos países temas como el homosexualismo, los tatuajes o las drogas, las
nuevas generaciones han digerido sin ningún problema, de forma tal que ha
permitido ciertas flexibilidades en las leyes, actuando dicho digerir en forma
de presión indirecta.
En la
actualidad podría ser natural ver a individuos tatuados, parejas del mismo sexo
de la mano o individuos con buena formación estar involucrados activamente en
el mundo de las drogas, de la misma manera como cuando se está involucrado en
el mundo del alcohol.
El consumo
de marihuana ha penetrado tanto dentro de algunas culturas que ya no nos llega
a sorprender ver a padres o profesores fumar ante sus hijos o alumnos, o algún
colega o compañero disculparse para ir a fumarse “uno”.
Incluso
podríamos encontrarnos con la sensación de que una mayoría dentro de cierta
sociedad no tendría ningún problema con el consumo de marihuana, lo cual podría
sentar las bases para futuras legalizaciones.
En la
Televisión de ciertos países ya se pueden ver a homosexuales asumidos y no
asumidos de manera natural o personajes con más de algún tatuaje, muy distinto
a los tiempos en que ver a un homosexual causaba alta impresión, lo mismo que
alguien que estuviera tatuado.
Esta es la
generación de los piercings, los tatuajes, las bebidas “energizantes” , la
Internet, las “redes sociales” (Facebook, Twitter), los correos electrónicos,
los MP3, los MP4, etc; la generación de los “high school” ó los “colleges”.
Esta es la
generación en la que se ha puesto nombre a comportamientos tan antiguos como lo
puede ser el llamado “bullying” o la “pedofilia”; la generación la cual se ha
encontrado con nuevas “enfermedades” donde antes no las habían, y que ahora las
señalan como “depresión”, “obesidad”, “alopecia”, “impotencia”, etc.
Ya no nos
impresiona ver a padres tatuados, o que escuchen música Punk o Thrash Metal.
Poco a poco
nos iremos encontrando con abuelos sumergidos en la Internet o en las “redes
sociales”; abuelos con más de algún tatuaje.
Muchos de
los abuelos no serán más lo típicos que escuchaban boleros en sus años mozo,
sino abuelos ex punkies, thrasher, hip-hoperos, etc.
Y así como
va el desarrollo de la pornografía, a la par con las nuevas tecnologías, en el
futuro no nos habrá de sorprender ver a muchos hijos de madres trabajadoras del
porno.
–Y qué hace
tu mamá, en qué trabaja?
–Trabaja en
la industria pornográfica. Es actriz. Le encanta su trabajo.
–Qué?!!!
–Hey,
amigo!!! Tienes que ser más OPEN MIND. Evoluciona. Estamos ya en el siglo XXI…
¿Por qué no hacemos un Swinger? Tengo ganas de conocer a tu pareja. ¿No te
gustaría conocer a la mía?
* Analista
político nacional e internacional - Political Analyst - Crítico de política y
Cultura Contemporánea - Autodidacta
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