ANGUITA: LOS ERUDITOS DEL "COMITÉ DE SABIOS" Y LAS PENSIONES

 "La economía es una ciencia fuertemente impregnada de ideología"

Lunes, 17 de junio de 2013

Por Julio Anguita

     En 1772 el militar y escritor José Cadalso (1741-1782), escribió una sátira que bajo el título arriba escrito, ridiculizaba a quienes usaban una erudición muy superficial. Tras la explicación en directo y después por escrito de los miembros de la comisión de expertos para analizar la viabilidad de las pensiones es difícil negar que la economía es una ciencia fuertemente impregnada de ideología y de opción por unos intereses determinados.
      En dos razones fundamentan estos “sabios” la necesidad de corregir el incremento de las jubilaciones y atemperarlo a la “realidad”: el aumento progresivo de las expectativas de vida y la repercusión del baby boom...
      A primera vista esta erudita explicación está llena de rigor y sentido  común, pero si reflexionamos siquiera unos instantes empezamos a encontrar lagunas y ocultaciones. En primer lugar, las pensiones pueden atenderse desde los Presupuestos sin que deba existir un fondo específico como el existente en España. Serían las reformas fiscales pertinentes las potenciadoras de su capacidad para atender a los jubilados dignamente.
    Pero, y entrando en la lógica de los expertos, no he encontrado una variable que debería tenerse en cuenta ¿sobre qué porcentaje de paro se hace la estimación? Es indudable que si el paro disminuye a consecuencia de empleos medianamente dignos, las cotizaciones aumentarán, ¿no se prevé ese escenario? ¿Acaso el futuro sólo nos deparará creación de minijobs sin capacidad de cotizar a la seguridad social? ¿Por qué no se estimula la productividad a través de los mecanismos de modernización empresarial que no sean sempiternamente la bajada de salarios?
      La lógica científica basada en una predeterminación aleatoria en beneficio de una parte no es otra cosa que un simulacro para justificar lo injustificable. Por eso el llamado coeficiente de factibilidad no es algo aséptico sino el multiplicador de una gravedad crónica. Y lo llaman ciencia.

Fuente: www.canarias-semanal.org