En un discurso
pretendidamente institucional el expresidente reivindica la
"interrelación" entre representación política y movilizaciones
sociales como garantes del sistema democrático
IÑIGO
ADURIZ Madrid 25/06/2013 21:51 Actualizado: 25/06/2013 22:17
El expresidente del
Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero, junto al presidente del Club Siglo XXI,
Eduardo Zaplana, son seguidos por la vicesecretaria general del PSOE, Elena
Valenciano, y el expresidente del Congreso José Bono.- EFE
Zapatero:
"Nada atormenta más a un presidente del Gobierno que los datos de
desempleo"
El
expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero lo ha querido dejar
claro nada más empezar. "Trato de interferir lo menos posible en las
decisiones de los que están en el poder". Es decir, advertía a los
asistentes de que nadie esperara que durante el discurso que iba a pronunciar
en Madrid iba a producirse ningún cuestionamiento de la estrategia de su
partido, la del líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, y ni mucho menos
de la de su predecesor en el cargo al frente del Ejecutivo, Mariano Rajoy.
El
Zapatero más institucional ha cumplido de largo con esas expectativas en su
intervención en el Club Siglo XXI. Con la valoración de los políticos y de las
administraciones en los niveles más bajos de la historia democrática, el
expresidente ha querido lanzar todo un alegato a favor de todos ellos como
"garantes", ha dicho, no sólo del sistema democrático sino también
de los derechos ciudadanos.
Primero
ha lanzado una acérrima defensa del papel de las movilizaciones sociales.
"Hay quien interpreta que esas formas de participación de la ciudadanía
ponen de manifiesto la debilidad de nuestra democracia representativa, o
incluso pueden suponer una alternativa a la misma", ha recordado. Pero
a renglón seguido ha considerado que esas movilizaciones sociales "son
expresión de la democracia misma" y "forman parte de la fisiología y
no de la patología del sistema".
"No hay democracia
sin partidos"
Zapatero
cree, no obstante, que no es posible ejercer esa participación social sin la
representatividad en las instituciones. Aquí ha introducido su segunda defensa,
la de los políticos. "La representación y la participación social se
relacionan en un diálogo permanente, interaccionan y así enriquecen el
proceso de tomas decisiones", ha dicho. Ha mencionado, como ejemplos,
la ley del matrimonio igualitario, o la "necesaria lucha por la igualdad
de los derechos de las mujeres".
Llegado
a este punto, les ha llegado el turno a los partidos. "La democracia es
pluralismo, y debemos recordar que el pluralismo lo encarnan los
partidos", ha insistido, porque "no hay democracia sin partidos
políticos". Zapatero ha pasado por encima del proceso de renovación
abierto por el PSOE, su partido, el que no levanta cabeza desde su salida del
Gobierno. Su exlíder ha alabado su "capacidad de iniciativa" y ha
confiado, sin mencionar directamente a las primarias, de que sabrá adaptarse
para hacerse más democrático.
El "papel
integrador" de Juan Carlos
Tras
los explícitos respaldos lanzados hasta entonces, a Zapatero aún le quedaba un
capote para el rey. "No deberíamos olvidar el papel que el rey a
desempeñado en el trance de contribuir a superar páginas difíciles de nuestra
historia", ha rememorado. Porque si bien los "grandes países
democráticos nunca huyen de la crítica al poder", tampoco
"vacilan" a la hora de "reconocer a quienes han desempeñado
una decisiva tarea integradora".
Ni
Rajoy ni Rubalcaba han sido objeto de sus críticas. Ni mucho menos. De hecho,
Zapatero ha celebrado como "muy positivo" el pacto alcanzado por
ambos para llevar una posición común al Consejo Europeo del jueves. Así,
mientras ha recordado a su predecesor en el PSOE que puede contar con él
"para lo que quiera", el expresidente del Gobierno ha deseado suerte
a su sustituto en La Moncloa en su lucha contra el paro, porque "nada
atormenta más a un presidente que el paro".
Perdió la batalla contra
el desempleo
Él,
ha reconocido, perdió su propia batalla contra esta lacra que "afecta a
España en cada una de las crisis". Y por eso ha emplazado a todas las
instituciones a trabajar para luchar contra ese factor estructural que se
repite en el tiempo. En esta reaparición pública en el contexto del ciclo de
conferencias en el que también participó hace dos semanas José María Aznar,
Zapatero ha estado arropado por algunos de sus ministros y hombres y mujeres de
confianza, como José Blanco, José Bono, Cándido Conde Pumpido o Beatriz
Corredor. Por parte del PSOE estaba su número dos, Elena Valenciano, y otros
miembros de la Ejecutiva de Rubalcaba. Éste no ha acudido por estar en el
Congreso en la votación de la proposición no de ley surgida del pacto PSOE-PP.
Fuente: www.publico.es
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