"Emilio Botín, Miguel Blesa, Isidro Fainé, De Guindos… Todos
ellos culpables. Todos ellos señalados por la sociedad civil organizada. Todos
ellos perseguidos hasta que se cumpla el reclamo: Juicio y castigo."
España | Rafael Mayoral* / Irene Montero | 18-06-2013 |
Diferentes
Plataformas de Afectados por la Hipoteca, junto a otros colectivos sociales,
han iniciado el pasado 8 de junio un proceso de movilización contra la
impunidad financiera, la estafa hipotecaria y en defensa del derecho a la
vivienda. Hemos subido las apuestas. Exitosas marchas en Madrid, Sevilla,
etc. daban el pistoletazo de salida a una campaña de señalamiento a los
culpables de la estafa hipotecaria, reclamando su juicio y consecuente
castigo por los delitos económicos de lesa humanidad que entendemos han
cometido y siguen cometiendo con sus actuaciones al frente de los consejos de
administración de las principales entidades financieras del país.
Emilio
Botín, Miguel Blesa, Isidro Fainé, De Guindos… Todos ellos culpables. Todos
ellos señalados por la sociedad civil organizada. Todos ellos perseguidos hasta
que se cumpla el reclamo: Juicio y castigo. Y es que durante todos estos años
de crisis económica, social y política, el capital financiero y los mercados
han sido nombrados como algo abstracto, intangible. Los políticos,
representantes de sus intereses en las instituciones del Estado, sí han
recibido un mayor señalamiento, pero el foco de las responsabilidades pocas
veces ha sido concretado en los nombres y apellidos de los principales miembros
de los consejos de administración de las entidades financieras responsables de
nuestra situación. Algo que contrasta con el papel central que ocupa la
oligarquía financiera en la toma de decisiones a nivel estatal, europeo e
internacional en el desarrollo de la vida económica y política.
Es
por ello que la Marcha del 8J constituye una apuesta certera y decidida a
disparar al centro de poder; a luchar sin descanso por la verdad y la
justicia, por la identificación y juicio para los principales responsables de
la violación sistemática de derechos humanos que se produce día a día en
nuestro país.
La
Marcha del 8J representa además una propuesta de lucha colectiva y organización
popular pensada y desarrollada por los y las afectadas, por las personas que
sufren día a día las consecuencias de las irresponsables decisiones de estos
magnates del capital financiero. No queremos que nos regalen nada, queremos
aprender juntos y juntas a conquistar nuestros derechos.
Ésta
es así una propuesta de lucha ilusionante y de largo alcance. Peleamos contra
la impunidad financiera, contra la estafa hipotecaria y por el derecho a la
vivienda. Pero más allá de ello, sabemos que con nuestra acción golpeamos al
núcleo de poder que nos niega el ejercicio de nuestros derechos, y que no nos
rendiremos hasta conquistar todos ellos. Nuestra lucha es por la vida.
*Rafa
Mayoral (@MayoralRafa) es abogado activista por el derecho a la vivienda de la
PAH.
**Para
Tercera Información.
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