jueves, 18 de diciembre de 2014

EL CATEDRÁTICO CENTENO CONTINÚA DANDO DATOS DE LA "VORACIDAD RECAUDATORIA DE JUAN CARLOS I"



Silencio hermético de la prensa y de los partidos institucionales
   Jueves, 18 de diciembre de 2014
 Acompañadas por el más hermético silencio de los medios de comunicación españoles,  las revelaciones sobre Juan Carlos de Borbón realizadas por Roberto Centeno, el catedrático de Economía y ex alto cargo de la empresa de suministro de petróleo CAMPSA, continúan escandalizando aquellos sectores de la opinión pública que alcanzan a conocerlas.
      Centeno, que es un hombre de ideas conservadoras, dijo desde los micrófonos de  Radio 3W, que la  “princesa” Corinna había mediado en la OPA que petrolera rusa Lukoil intentó hacer sobre la española Repsol. Centeno precisó que hacía tales declaraciones no como  un analista en cuestiones de energía, sino en calidad de  testigo presencial, pues reconoció que él era asesor de la empresa rusa Lukoil cuando  alguien desde las más altas instancias del Estado,  lo hicieron desaparecer  del escenario para proporcionarle el “negocio” de la OPA a la "princesa" Corinna.
       Según el catedrático Centeno, la  incontenible avidez recaudatoria  del monarca español, Juan Carlos de Borbón, no tenía límites. Centeno manifestó asimismo que ante la evidente  "imposibilidad" de investigar el origen de la fortuna real a través de una Comisión parlamentaria, su propósito está siendo  aportar nuevos indicios que revelen el interés de Juan Carlos por las operaciones de compraventa de hidrocarburos. Según el catedrático, tal voracidad real continúa proyectandose hasta nuestros días.
        "Para enriquecerse con la adquisición de crudo  no hace falta ser un gran especialista en petróleo. Hace falta una persona que tenga acceso a determinados despachos y después, gloria. Y Corinna, no sé si fue a raíz de eso o después, tenía entrada con toda facilidad al despacho del señor Putin. Y a mí no me hubieran dejado ni acercarme a la reja”, dice Roberto Centeno 
La aparición de Colina hizo esfumar a Centeno del escenario de los "negocios petrolíferos"
        “Yo trabajaba con Lukoil   como asesor - dice el catedrático de economía - porque ellos estaban pensando entrar en España y yo lo que pretendía, porque lo había hecho con otros italianos (Moratti, ex dueño del Inter de Milán) y con otra sociedad italiana que se llamaba RG, era hacer entrar a Lukoil en España, porque era una empresa de una cierta importancia” 
        Según Centeno.  él le había  manifestado a los rusos que “había dos posibilidades. Una, entrar a lo pobre, que era comenzar a importar petróleo y hacer contratos con gasolineras, etc… La otra era entrar a lo grande. Esto era muy sencillo y consistía en hacerle una OPA a Repsol y aquí paz y después gloria. Lukoil tenía medios suficientes para meter esa OPA. Empezando además no por una OPA a la totalidad, sino por una parte que tenía Sacyr-Vallermoso, que yo creo que era del 20% en aquellos tiempos y que se vendía, porque ellos tenían necesidad de venderla”.
          “Yo estaba negociando ese tema con los rusos en Londres. Y, en un momento determinado, tenemos una reunión allí y me dicen que vamos a ir adelante con todo. Pasan las semanas, quedan en llamarme. Yo me vengo a Madrid y no me llaman. Yo telefoneo a la persona con la que contactaba allí, Andrey Vlasov, y le pregunto qué pasaba con esto. “Roberto, es que me da vergüenza decírtelo pero resulta que hay otra persona… No lo vamos a poder hacer a través tuyo porque son órdenes de arriba, de muy arriba“.
         Ante esta declaración, Centeno se quedó boquiabierto  lo que le revelaron los rusos. Naturalmente, el catedratico obligado a formularles la pregunta correspondiente: “¿Quién es esta persona?”. La respuesta  fue  terminante: Corinna Zu Sayn-Wittgenstein, con la que "alguien" mantenía  especialisimas  relaciones.

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