Los ministros de Rajoy, están
llevando a cabo una demolición controlada de las leyes socialistas que
tímidamente habían irrumpido en la sociedad para hacerla más humana e igualitaria: Han asaltado el Código Penal;
constreñido la seguridad ciudadana; adelgazado las leyes laborales, menguada la
asistencia sanitaria, violado la
educación pública y han dejado en harapos las políticas sociales.
Ante tamaño desafuero y por si
alguien pide explicaciones al Tribunal Constitucional, han procurado una mayoría
en esa institución para garantizar su trapaza. Empleando el rodillo en el
Congreso, BOE en ristre, roban la bolsa
y se permiten perdonar la vida, pertrechados tras leyes represoras que someten
la voluntad del ciudadano. Ha dado comienzo el estado policial.
Entiende el actual presidente que
Zapatero ha ido muy lejos. Vamos, que legislativamente, hemos vivido por encima
de nuestras posibilidades. Curiosamente esta debacle no la auspician ni los
mercados ni Bruselas ni el BCE o el FMI, que presurosamente han salido a decir
que con ellos no va esa guerra, solo el déficit. Son, pues, la CEOE –empresarios- y la SICAR –Santa Iglesia
Católica Apostólica Romana- los inspiradores de esa regresión al más puro
pasado franquista.
¿Hasta cuándo abusarán de nuestra
paciencia esos Catilinas? No sé si son conscientes de la que puede venirles
encima si tensan más la cuerda; no hay que remontarse a la toma de la Bastilla para recordarles
que la guillotina ha funcionado
recientemente en África y Medio Oriente.
Poco antes de perder la cabeza el
monarca francés, aún no había entendido la desesperación del pueblo,
confundiendo con una algarada lo que era una revolución.
Carlos Etcheverría
Expresidente y Fundador del Ateneo Republicano de Galicia
Fundador de Nuevos Republicanos 1905 ‘club de Opinión
Política’
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