Artículos de
Opinión | Rómulo Pardo Silva | 25-01-2013 |
La
orientación de la juventud para su elección de trabajo debe ser pensando y
preparando las realidades futuras.
Más adelante
muchas actividades actuales no serán necesarias y otras que deben continuar
tendrán que ser remodeladas. Un cambio esencial será contar con políticos de
nueva civilización.
Serán
inútiles los corredores de bolsa, cortadores de diamantes, publicistas
comerciales, arquitectos de mansiones, pilotos de autos de carrera…
Deberán
conservarse como imprescindibles los campesinos, albañiles, artesanos,
mecánicos, pescadores, médicos, profesores, artistas, científicos, periodistas…
Tendrá que
haber militares antifascistas porque el proceso no será pacífico.
Lo urgente
será el desarrollo en cada pueblo de talentos políticos que eduquen y conduzcan
en las situaciones de caos, violencia, sed, hambre, migración… guerra.
Para el
programa sostenible y solidario solo servirán líderes frugales, honrados,
transparentes, inteligentes, humanistas. Hombres y mujeres que amen todo el
planeta y sus variadas formas de vida.
Sin ellos no
se podrá encantar a miles de millones de personas a realizar actos y seguir
valores impensables hoy:
Los campos
deberán repoblarse para producir con energía humana en lugar de petróleo
alimentos distintos a los usuales.
Con los
recursos limitados el consumo tendrá que ser moderado y racional.
Habrá que
contener las ambiciones individuales orientadas a la explotación de otros.
Los trabajos
serán múltiples hasta el fin del planeta en 5 mil millones de años y para que
se integren en una sociedad justa en la cumbre política deberán gobernar los
mejores que hoy casi no se encuentran en los poderes públicos. Es una tarea a
lograr.
Junto a
obreros, profesionales, creadores, serán indispensables nuevos políticos
estimados y respetados.
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