Botín se frota las manos con las reformas del PP
El presidente del Santander, el
tercer banco más grande del mundo por beneficio operativo, se frota las
manos gracias a las reformas del PP, pensadas para mantener el estatus a
tipos como él.
España |
Víctor J. Sanz - Tercera Información | 11-09-2012 |
Emilio Botín, presidente del Santander, celebra las reformas y los recortes sociales y laborales que viene perpetrando el PP contra los ciudadanos españoles.
Botín lo admitió durante una rueda de prensa en México con motivo de la salida a bolsa de la filial mexicana del Santander. Botín está satisfecho con el trabajo del PP contra las clases más humildes: "Las últimas disposiciones del Gobierno están bien encaminadas". Todas ellas, "la reforma laboral, la reforma fiscal, el déficit, la reforma financiera", para Botín, en todas ellas el Gobierno ha legislado con la mirada puesta en favorecer el mantenimiento del estatus de las clases más pudientes, las que detentan el poder de facto, es decir, a juicio de Botín, "el PP ha estado acertado".
Además de admitir que está satisfecho con las medidas que el Gobierno está tomando contra las clases más desfavorecidas de la sociedad, Botín señaló que le gustaría que España se acogiera al llamado "rescate blando", lo que en la práctica supondría un empeoramiento severo de las condiciones laborales y sociales para la gran mayoría de los españoles, que verían como sus ingresos futuros estarían condicionados en buena medida del nivel de endeudamiento a que el Gobierno del PP les someta en beneficio de las élites financieras internacionales, a las que pertenece el banquero español.
Asimismo, Botín aplaudió la creación del "banco malo" que, con dinero público, pagará los errores y los excesos de la mala gestión privada que los bancos hicieron con los "activos tóxicos" inmobiliarios, cuyo número aumenta día a día debido a los incesantes desahucios a que someten a sus indefensos clientes, con quienes suelen negarse a llegar a cualquier otra forma de acuerdo que no incluya la expropiación de la vivienda, pero sin establecer a cambio ninguna quita de la deuda pendiente. Su frase: "Me parece bien que lo hayan hecho porque lo han dicho desde Bruselas" delata el sometimiento de las personas más influyentes a los dictados de los mercados, con sede en el Gobierno europeo de Bruselas.
Para Botín es una cuestión importante el precio que el "banco malo" habrá de pagar, con dinero público, a los bancos privados, los activos tóxicos que le quieren endosar al tesoro público. Los planes del Gobierno contemplan que los precios de esta compra obligada sean impuestos por agentes independientes, y no por la parte compradora a modo de oferta, que es lo que menos cabía esperar de un sistema económico de mercado.
Botín lo admitió durante una rueda de prensa en México con motivo de la salida a bolsa de la filial mexicana del Santander. Botín está satisfecho con el trabajo del PP contra las clases más humildes: "Las últimas disposiciones del Gobierno están bien encaminadas". Todas ellas, "la reforma laboral, la reforma fiscal, el déficit, la reforma financiera", para Botín, en todas ellas el Gobierno ha legislado con la mirada puesta en favorecer el mantenimiento del estatus de las clases más pudientes, las que detentan el poder de facto, es decir, a juicio de Botín, "el PP ha estado acertado".
Además de admitir que está satisfecho con las medidas que el Gobierno está tomando contra las clases más desfavorecidas de la sociedad, Botín señaló que le gustaría que España se acogiera al llamado "rescate blando", lo que en la práctica supondría un empeoramiento severo de las condiciones laborales y sociales para la gran mayoría de los españoles, que verían como sus ingresos futuros estarían condicionados en buena medida del nivel de endeudamiento a que el Gobierno del PP les someta en beneficio de las élites financieras internacionales, a las que pertenece el banquero español.
Asimismo, Botín aplaudió la creación del "banco malo" que, con dinero público, pagará los errores y los excesos de la mala gestión privada que los bancos hicieron con los "activos tóxicos" inmobiliarios, cuyo número aumenta día a día debido a los incesantes desahucios a que someten a sus indefensos clientes, con quienes suelen negarse a llegar a cualquier otra forma de acuerdo que no incluya la expropiación de la vivienda, pero sin establecer a cambio ninguna quita de la deuda pendiente. Su frase: "Me parece bien que lo hayan hecho porque lo han dicho desde Bruselas" delata el sometimiento de las personas más influyentes a los dictados de los mercados, con sede en el Gobierno europeo de Bruselas.
Para Botín es una cuestión importante el precio que el "banco malo" habrá de pagar, con dinero público, a los bancos privados, los activos tóxicos que le quieren endosar al tesoro público. Los planes del Gobierno contemplan que los precios de esta compra obligada sean impuestos por agentes independientes, y no por la parte compradora a modo de oferta, que es lo que menos cabía esperar de un sistema económico de mercado.
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