domingo, 30 de septiembre de 2012

“ESPAÑA ERA UN PAIS RICO, SAQUEADO POR MONARQUIA, POLITICOS Y BANQUEROS”

'España es un país pobre, ¿no?'

Comedor social en Girona. Así ve España 'The New York Times'. | S. Aranda VEA EL REPORTAJE GRÁFICO COMPLETOComedor social en Girona. Así ve España 'The New York Times'. | S. Aranda VEA EL REPORTAJE GRÁFICO COMPLETO
  • En EEUU persiste la imagen de una economía y sociedad tradicionales
  • Los medios transmiten mayormente el estado de crisis y el descontento social
  • Una breve 'época dorada' nos vinculó a las renovables y la alta velocidad
  • No se ha sabido explotar el potencial de la comunidad hispanohablante
  • Vea el reportaje gráfico completo
Edward tiene 68 años, estudió hasta el Bachiller y está jubilado. Su pensión no le da para vivir, así que está buscando un trabajo complementario. Hace poco estuvo a punto de lograr un empleo como mecánico en un garaje, pero la cosa no funcionó. Y eso que él sabe de coches. Durante la mayor parte de su vida se dedicó a comprarlos, arreglarlos y revenderlos en las afueras de Washington. Ahora vive en Tampa, en Florida, uno de los lugares favoritos de los jubilados estadounidenses. Es veterano de guerra de Vietnam, pero nunca habla de eso. Cuando se le pregunta qué opina de España hay un silencio al otro lado del teléfono. Tras unos segundos, Edward dice: "Estuve allí cuando estaba en la mili. Fuimos de bares. España era un país muy bonito entonces. Luego fuimos a Puerto Rico. También era muy bonito. No sé bien, la verdad, pero España es un país pobre ¿no?"
"Corréis delante de toros y tenéis unas fiestas en las que os tiráis tomates"
-Lisa, 23 años, estudiante de Lingüística
La hija de Edward se llama Lisa, acaba de cumplir 23 años y estudia Lingüística. Cuando conoce la respuesta de su padre se queda contenta. "Por lo menos os distingue de Puerto Rico", comenta. Para ella, España es "un país más tradicional que el resto de Europa. Y que tiene esos problemas con Portugal y los vascos. Donde los vascos es donde hay esa guerra pequeña". Lisa también tiene claras dos tradiciones españolas: "Corréis delante de toros y tenéis unas fiestas en las que os tiráis tomates". Y un personaje: Antonio Banderas. "Adoro su acento".
Efectivamente, hablar inglés con acento español en EEUU sirve para ligar. Es algo que probablemente no esté incluido en los trabajos preliminares para la presentación de la Marca España en octubre.
Lo mejor para que un estadounidense asuma lo que está pasando en España es decirle: "España es como Florida, como Arizona o como Nevada". O sea, los sitios a los que se van los ciudadanos de ese país a jubilarse y los jóvenes a correrse juergas, y que son sinónimo de 'burbuja' inmobiliaria gigante. Claro que España no tiene Cabo Cañaveral ni un rosario de bases militares, que en la práctica implican una transferencia de riqueza de Washington a esos territorios. Aun así, tres años después del final de la recesión, en el mes de agosto una casa de cada 368 fue desahuciada en esos estados.

Protestantes vs católicos

"Mi mujer vio las fotos de los disturbios en España en la primera página del periódico, y los dos comentamos los problemas de España, Italia, Grecia, Irlanda y Portugal. En nuestra mente, os asociamos a los cuatro"
Walter, doctor en Ciencias Políticas y ex analista del Departamento de Estado
A Walter no hace falta explicarle mucho de España. Tiene casi la misma edad de Edward, pero él es doctor en Ciencias Políticas por la Universidad de Chicago y hasta hace una década fue uno de los jefes de análisis del Departamento de Estado. Ahora es jefe de Departamento en una de las escuelas de Políticas más prestigiosas de EEUU, de la que podría salir, dicen, el secretario de Estado si Mitt Romney es reelegido. Walter, sin embargo, es demócrata. Su mujer es una empresaria de la India, a la que conoció cuando estuvo destinado en la Embajada de ese país. "Esta mañana mi mujer vio las fotos de los disturbios en España en la primera página del periódico, y los dos comentamos los problemas de España, Italia, Grecia, Irlanda y Portugal. En nuestra mente, os asociamos a los cuatro", explica cuando se le hace la misma pregunta que a Edward y a Lisa. A continuación, empieza a perderse en disquisiciones sobre Max Weber y las diferencias entre la ética del trabajo de los países protestantes del norte de Europa (muy laboriosos) y los católicos del sur (más bien vagos).
Tal vez el hecho de que Walter sea de ascendencia danesa influya en esa actitud pro-nórdica. Pero lo cierto es que España tiene la imagen por los suelos en Estados Unidos. El martes, la primera página de 'The New York Times' arrancaba con este titular: 'España retrocede mientras sus hambrientos hurgan en los cubos de basura a la búsqueda de la siguiente comida'. El artículo se acompañaba en la web del diario con la serie de fotos que les ofrecemos junto a este artículo [VEA LA GALERÍA], algo que parece haberse convertido en un subgénero periodístico: imágenes -preferiblemente en blanco y negro- de españoles con cara de desolación en pisos vacíos, oficinas del INEM y rebuscando en contenedores de basuras.
No es un subgénero nuevo para la autora del reportaje, Suzanne Daley, ex jefa de la sección de Nacional del diario y actualmente corresponsal para Europa, con base en París. El 28 de julio publicó otro artículo, titulado 'Una frágil muleta: Los ancianos españoles cargan con el peso de la familia'. El 26 de mayo, 'A medida que el crédito de los bancos se seca en España, los pequeños y medianos negocios luchan por sus vidas'. Justo un año antes, 'En busca de la riqueza de África a Europa para encontrar sólo miseria', sobre un grupo de inmigrantes subsaharianos que sobrevivía en un monte de Palos de la Frontera.
[foto de la noticia]
Benidorm | S. Aranda VEA EL REPORTAJE GRÁFICO

Sol y naranjas

Efectivamente, España tiene muy mala imagen en EEUU. Aunque no es tan mala como, por ejemplo, en Alemania, donde el semanario 'Der Spiegel' nos obsequió este verano con una deliciosa serie de crónicas de Juan Moreno -nacido en España- tituladas 'Regreso a Absurdistán', donde describe al país como, por ejemplo, "una economía basada en el sol y en las naranjas".
En los últimos dieciocho meses, España ha sido noticia de primera página en EEUU por la ocupación de Sol por los 'indignados'; por la manifestación de la Diada; por el abandono de ETA de la violencia; por el triunfo en la Eurocopa; y, sobre todo, por la crisis. Aparte, los Sanfermines, pero eso es lo habitual.
Para los medios de comunicación las malas noticias siempre venden, así que esa selección no debería sorprender. Claro que España también tuvo una época dorada en EEUU, cuando en 2009 el programa de estímulo económico de Barack Obama se planteó como un objetivo estratégico el desarrollo de líneas de alta velocidad en EEUU, un país en el que apenas existe transporte de pasajeros por ferrocarril. España y EEUU firmaron un memorándum de colaboración y hasta un representante del Ministerio de Fomento se estableció en la sede Departamento de Transporte, en Washington, para coordinar la cooperación. En aquellos días, 'The Wall Street Journal' dedicaba reportajes a la alta velocidad española. Y el Departamento de Energía se proponía como objetivo desarrollar las renovables, una vez con España como modelo. Pero también se multiplicaban las referencias a la ralentización de la economía española. Una ralentización que se ha terminado por convertir en una de las mayores crisis para la economía mundial. Hoy no queda nada de aquella época feliz de España en EEUU.
No sólo ha tenido la culpa la crisis española. EEUU aún no ha logrado licitar ni un kilómetro de alta velocidad, aunque entre las empresas que participan en el primer concurso, que se celebrará este otoño en California, hay cinco españolas. La política energética de Barack Obama duerme el sueño de los justos, liquidada por el bloqueo de la oposición republicana y por el boom del gas y el petróleo no convencionales. Y la peculiar idiosincrasia española (de la que Max Weber no dijo nada, acaso porque sea más bien cosa de Sigmund Freud) también ha ayudado: a fin de cuentas, debemos de ser uno de los pocos países que, cuando logra que EEUU decida que su modelo energético debe ser analizado con detalle, saca un informe afirmando que ese modelo energético es un desastre.

España, en los pies de página

Aun así, casi 70.000 estadounidenses trabajan en empresas españolas. El gas natural que abastece a Nueva York va por un gasoducto de una empresa española, y una parte considerable de las energías renovables de EEUU y del tráfico aéreo de ese país están en manos de empresas de España. Javier Solana trabaja en el think tank Brookings Institution, y José María Aznar en la Universidad Johns Hopkins.
[foto de la noticia]
Protesta por los recortes en Jaén | S. Aranda VEA EL REPORTAJE GRÁFICO
Pero los estadounidenses siguen sin tener una opinión favorable. Brookings es el think tank más prestigioso del mundo. Desde el 20 de noviembre ha publicado unos 90 documentos de análisis económico en los que sale la palabra 'España', pero en la mayoría de ellos en pies de página. En otros, se habla de la posibilidad de que España suspenda pagos, de que salga del euro, o las dos cosas a la vez, y siempre se la agrupa con Grecia, Portugal, Italia e Irlanda. Solo hay dos estudios específicos. Los dos son negativos.
"Sé que tienen la economía horrorosa y que están prendiendo fuego a cosas en la calle", explica Sheila, de 57 años, madre soltera y propietaria de un restaurante en Maryland. Linda, una abogada de la Reserva Federal de 38 años que ha vivido en Francia, opina que "España está claramente menos desarrollada y es mucho más provinciana que otras naciones europeas". Su madre, Melissa, se limita a hacer una afirmación de índole práctica: "Comen mucho pescado, como nosotros", en referencia a sus orígenes en Taiwán, de donde emigró a EEUU en 1980. Sara también tiene 38 años, y dos masters: un MBA y otro de Relaciones Internacionales. Es empleada del Banco Mundial, hace otra reflexión: "Es un país que demuestra que el Estado de Bienestar es insostenible".

¿Qué país descubrió América?

Sin embargo, el gasto público y la deuda en España han sido -y todavía siguen siendo- menores que los de Estados Unidos y Alemania. Así que no están como para darnos lecciones, por lo menos hasta que el año que viene les superemos. Pero el monigote de que España es un país 'socialista' y muy generoso en sus prestaciones sociales también tiene un interés político tras él. "Es innegable que en Estados Unidos hay un debate sobre el tamaño del Estado", explica una persona que ocupó un alto cargo con George W. Bush y que ahora asesora al candidato republicano, Mitt Romney, cuando se le interroga por el linchamiento al que someten los republicanos en campaña a la pretendidamente 'socialista' España.
"España está claramente menos desarrollada y es mucho más provinciana que otras naciones europeas".
-Linda, 38 años, abogada de la Reserva Federal
España nunca ha estado presente en EEUU, por más que los españoles nos hayamos autoengañado. Por no saber, muchos estadounidenses no saben qué país descubrió América, así que la obsesión de nuestras autoridades por recordarles que dólar es una palabra española -por no hablar de los fastos que se avecinan en 2013 para la celebración de los quinientos años del descubrimiento de Florida por Juan Ponce de León- son una forma fantástica de perder el tiempo en un país en el que, cuando se quiere quitar importancia a algo, se dice: "Eso es historia".
Acaso el problema no sea que los estadounidenses no sepan mucho de España, y que lo poco que sepan sea malo. Más bien, puede ser que los españoles creemos que sabemos de EEUU. Por más que hablemos de la influencia de la cultura latinoamericana en ese país, lo cierto es que todas las encuestas revelan que los inmigrantes de las ex colonias españolas se sienten cercanos a sus países de origen, no a la metrópoli. Encima, como cualquier consultor político sabe, una vez que el 'latino' se siente integrado en la sociedad estadounidense, tiende a distanciarse de su cultura de origen, a la que a veces asocia a pobreza, inmigración ilegal y estigma social.
En EEUU hay más cines que proyectan películas en hindi que en español, a pesar de que hay 3 millones de inmigrantes de India, frente a 40 millones de América Latina. Claro que los primeros ocupan el lugar más alto en ingresos y nivel educativo de todo EEUU. Los latinoamericanos compiten con los africanos por el más bajo.
Un ejemplo de esa actitud es Cameron, de 23 años, que estudia para actor y es hijo de uno de los generales con una carrera más brillante de EEUU: "España es un enigma interesante. Para mí, culturalmente, no está en Europa, sino en América Latina. Ah, y hacen corridas de toros".
Claro que el desconocimiento es mutuo. España es a EEUU, en términos de población y economía, lo que Estonia es a España. Y muchas actividades de promoción españolas en ese país se hacen sola y exclusivamente para el consumo interno. El Estado de las Autonomías, además, acrecienta ese desmadre, con una peregrinación constante de altos cargos de entidades territoriales que nadie conoce.
La Junta de Castilla y León envió hace años una misión a Nueva York. Al no especificar que Castilla y León son España, los neoyorquinos pensaron que era la representación de una junta militar de alguna dictadura latinoamericana. El Gobierno de Navarra, por su parte, lanzó una campaña de publicidad con el lema 'Spanish Fly'. Nadie les dijo que eso significa en inglés 'Mosca española'. Precisamente, esa mosca es lo que en España llamamos 'Mosca Mediterránea', una plaga que ha provocado que EEUU haya suspendido en el pasado las importaciones de cítricos. Es como si Tanzania lanzara una campaña de publicidad sobre el Parque Nacional del Serengeti con el slogan "Malaria".


No hay comentarios:

Publicar un comentario