Intelectuales de todo el continente lanzan
el Manifiesto Antifascistas Euorpeo para alertar a la sociedad sobre los
peligros del auge de la extrema derecha, aupada por la crisis económica
LUIS GIMÉNEZ
SAN MIGUEL Madrid 28/02/2013 16:11 Actualizado: 28/02/2013 16:42
Comedor social en Málaga impulsado por el 15-M y la
PAH.- erbancogueno
Desde el
comienzo de la crisis económica en Europa ha vuelto a surgir un fenómeno que
parecía haber sido enterrado con la paz firmada al final de la Segunda Guerra
Mundial: el auge de una extrema derecha neonazi con capacidad de articular
movimientos sociales amplios y llegar a las instituciones. El ejemplo más
paradigmático es el Amanecer Dorado, pero lo mismo ocurre en Hungría y otros países
del Viejo Continente.
Estos
movimientos "se enraízan en la sociedad formando verdaderos movimientos
populares de masas, radicales, racistas, ultraviolentos y pogromistas cuyo
objetivo declarado es la destrucción de toda organización sindical, política y
cultural de los trabajadores, el aplastamiento de toda resistencia ciudadana,
la negación del derecho a la diferencia y el exterminio -incluso físico- de los
diferentes y de los más débiles". Así arranca el Manifiesto Antifascista Europeo, una
iniciativa a la que se han adherido numerosos intelectuales y organizaciones
políticas de todo el continente para alertar a las sociedades de un peligro que
hace 70 años, también en un momento de crisis económica e inestabilidad
política, provocó la mayor guerra de la historia de la Humanidad.
En España,
el manifiesto cuenta ya con más de 300 firmas correspondientes a
intelectuales, activistas sociales y sindicalistas entre las que se encuentran
Federico Mayor Zaragoza, Alberto Garzón, José Luis Sampedro, Belén Gopegui,
Lidia Falcón, Jaime Pastor, Santiago Alba Rico, José Luis Centella, Gaspar
Llamazares, Carmen Lamarca, Laura Mintegi, Mónica Oltra... También
organizaciones como Izquierda Unida, el PCE, Ecologistas en Acción e Izquierda
Anticapitalista se han sumado a la iniciativa. Y lo que quieren es "debe
proponer una visión diferente de la sociedad, diametralmente opuesta a la
propuesta por la extrema derecha: es decir, una sociedad fundada en la
solidaridad, la tolerancia y la fraternidad, el rechazo al machismo, el rechazo
a la opresión de las mujeres y el respeto del derecho a la diferencia, el
internacionalismo y la protección escrupulosa de la naturaleza, la defensa de
los valores humanistas y democráticos", como reza el propio manifiesto.
"Amanecer
Dorado quiere un movimiento de masas para aplastar a la izquierda"
En el
Círculo de Bellas Artes de Madrid, dos de sus impulsores, el escritor y
profesor de filosofía moral Jorge Riechmann y activista Miguel Urbán,
miembro de Izquierda Anticapitalista, explican a Público los objetivos
que persiguen con esta iniciativa. "En muchos lugares de Europa existen
núcleos antifascitas juveniles, pero para el grueso de la sociedad son una
tribu urbana más, por lo que ya están desactivados de alguna forma. Y este no
es el tipo de respuesta social que necesitamos ahora mismo", asevera
Riechmann mientras deposita sobre la mesa Auschwitch ¿comienza el siglo XXI?
De Carl Amery.
Mientras,
Urbán se muestra convencido de que combatir al fascismo entre las capas
populares pasar por impulsar iniciativas desde la izquierda de base como hacer
comedores populares en los barrios antes de que lo haga la extrema derecha. O
lo que es lo mismo, "quitarles el espacio que puedan aprovechar para
canalizar el malestar en torno a la crisis". ¿Qué hace Amanecer Dorado
en Grecia? "Ante el deterioro del sistema público de salud, en vez de Médicos
Sin Fronteras, ellos hacen Médicos Con Fronteras y no atienden a los
inmigrantes. Frente a esto, hay que combatir los CIE, la segregación de los
inmigrantes en la sanidad pública, hacer comedores populares, parar los
desahucios y contar con un tejido asociativo".
Sin embargo,
no todas las derechas son iguales, tampoco las más extremas. Los
intelectuales creen que hay una diferencia clave entre partidos como el Frente
Nacional de Le Pen en Francia y el fenómeno de Amanercer Dorado en Grecia.
"Y es que Le Pen no intenta construir un movimiento de masas y Amanecer
Dorado sí, esto es lo que le permite aplastar a los movimientos populares
emergentes".
La importancia de la labor políltico-cultural y el
15-M
Jorge
Riechmann, además de filósofo, ha dedicado parte de su trabajo intelectual y
creativo a la poesía social. De esta forma, se muestra convencido de la
importancia que tiene en este momento la "labor político-cultural".
"La cosa es ir dando algunos pasos buscando adhesiones" y no
descartan que el PSOE acabe sumándose a esta iniciativa. Además, para Urbán la
importancia de esta labor cultural se pone de manifiesto cuando, después de a
la población migrante, es una de los fenómenos que más han atacado los neonazis
griegos, pues muchas de sus víctimas han sido artistas y periodistas. "Por
algo será".
"El
15-M ha politizado hacia la izquierda los dramas sociales de la crisis"
De momento,
en España no existe una fuerza homologable a Amanecer Dorado, ni tan siquiera
al Frente Nacional. Y esto se debe, en opinión de los ponentes, a la
eclosión del movimiento 15-M y la politización que éste ha hecho hacia la
izquierda de los dramas sociales que provoca la crisis económica. "La
dinámica del movimiento es expansiva y no deja lugares para que los otros
puedan coger ningún tema: ni la banca, ni las hipotecas, ni el exilio juvenil,
temas en los que ellas podrían crecer", sentencia Urbán.
Aunque
también otro factor importante. Y este es la estrategia
"atrápalo-todo" del Partido Popular, el "a mi derecha la
pared" de Manuel Fraga. Por eso, allí donde el partido actualmente en
el Gobierno pierde fuerza ganan fuerza los movimientos de extrema derecha,
exactamente como pasa con el caso de Plataforma X Catalunya en muchos pequeños
municipios.
Un ejemplo en la localidad catalana de Badia
Miguel Urbán
"Badia
es uno de los pueblos con más índice de inmigración de Catalunya y desde el
comienzo de la crisis mucha gente va a buscar comida a los contenedores de
basura. Hace unos meses, los militantes de Plataforma X Catalunya fueron a
donde la gente iba a recoger alimentos para expulsar a inmigrantes y a lo que
ellos consideraban 'okupas', de forma que sólo podían comer los españoles, o
catalanes. Entonces, los activistas de la asamblea de movimientos sociales de
Badia acudieron al lugar y echaron a los militantes derechistas. Los 'okupas' dijeron
que los que habían estado protegidos por PxC no deberían comer de esos cubos.
Sin embargo, la asamblea dijo 'esto no funciona así, aquí comemos todos'. Y
pasaron a implicar a todos en el reparto y gestión de la comida, ser sujetos
activos. Como hace la PAH. Esto cortocircuita de raíz el fascismo".
Fuente: www.publico.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario