Alfonso J. Vázquez Vaamonde
Viernes, 20 de febrero de 2015
Hay acuerdo
general en que las indemnizaciones impuestas a los alemanes tras perder la I
Guerra Mundial fueron excesivas. Si se dice que “en la mesa y en el juego se
conoce al caballero”. En este “juego” de la guerra, como la denominan algunos
descerebrados- ¿cómo puede ser un juego el asesinato / genocidio? - no hubo
caballeros entre los ganadores.
Las indemnizaciones eran lógicas si las paga el culpable: el
dictador monárquico o aristocrático que pagaba o forzaba a sus súbditos a
defender su finca - el reino - del robo del otro dictador monárquico o para
robarle la suya al otro. El que perdía indemnizaba al ganador, ¡ de su dinero!,
o cediéndole parte de “su” finca o de “sus” derechos. Los súbditos ya habían
pagado bastante con la destrucción sufrida en la guerra en vidas y bienes.
La necedad del Kaiser Guillermo II - ¡no fue el único! - al
invadir Bélgica y Francia tras el asesinato de Sarajevo, que a lo sumo hubiera
producido una guerra balcánica mas, produjo la I Guerra Mundial. Además de las
indemnizaciones territoriales, que también las hubo, no se impuso al Kaiser.
Las víctimas alemanas, perdida la vida de padres, esposos e hijos y gran parte
de su patrimonio soportaron además una injusta indemnización que debieran haber
pagado sólo los dirigentes que desencadenaron la guerra, no ellos. La
descapitalización de Alemania fue un caldo de cultivo que hizo nacer el
nazionalsozialismo apoyado por la derecha corrupta.
El nazismo apoyado por la derecha alemana corrupta “exigió a
los países invadidos un préstamo” ¡ por haber sido invadidos! Tras la
capitulación de la derecha corrupta- financiadora de los nazis - hubo exigencia
de indemnizaciones, pero Berlín comenzó su reconstrucción y apenas atendió a
las imposiciones de los aliados. Estados Unidos y Reino Unido obligaron a
Grecia - ¿con qué derecho? - a no reclamar ni reparación ni devolución
del “préstamo” a Alemania pese a ser Grecia más legítimo vencedor que
Francia cuya derecha colaboracionista sigue ocultando esa realidad. Grecia fue
uno de los pocos países que no recibió compensación por la que, acuerdos de
París, si pagaron Italia y Bulgaria. El “milagro alemán” se hizo con el dinero
del Plan Marshall y con la reducción la deuda alemana, 22.600 millones de
marcos de la I Guerra y 16.200 más de la II Guerra, en un 63 % obligando a
Grecia y a España, entre otros países (Tratado de Londres, 1953). Franco
encantado con tal de que no lo derrocaran.
Alemania terminó de pagar su deuda 65 años después, el
3.10.2010. Mientras, la eterna avaricia de la derecha alemana corrupta, sus
bancos, prestaban temerariamente dinero a Grecia y España conscientes de la
falta de garantías reales. Los bancos son responsables de su temeridad y ellos
deben asumir su error. Pero los gobiernos de Alemania, España y Grecia, exigen
a las víctimas, a nosotros, que paguemos la avaricia de la derecha bancaria
corrupta a cuyo servicio están.
Alemania dice que no reconoce la deuda de la II Guerra con
Grecia porque no hubo un acuerdo de paz definitivo con Hitler. ¿Están todavía
en guerra Alemania y Grecia? Además, si el tratado de Londres no incluía a la
DRA Oriental ¿a cuánto asciende su cuota con Grecia?
De todos modos la solución la tienen los griegos al alcance
de la mano: si dejan de ser ortodoxos y se declaran todos judíos cobrarán hasta
el último céntimo. Tsipras debería plantearse esa opción. Si no se lo cree vea
el Estado de Israel ¡cobrando hasta el último shekel!
Publicado por daniel
fernández abella en 6:10
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