“Yo…he visto cosas que vosotros no creeríais. Naves de
guerra ardiendo más allá de Orión.
He visto rayos-c resplandecer en la oscuridad, cerca
de la puerta de Tanhauser.
Todos esos…momentos se perderán…en el tiempo.
Como…lágrimas…en la lluvia. Es hora…de morir”.
Ya no es necesario empezar ningún artículo, que intente describir
la realidad social de la que formamos parte, diciendo que estamos
manipulados por los pocos que ostentan el poder, económico, político e
ideológico. Lo estamos, precisamente porque han ido, poco a poco,
logrando la supremacía sobre la realidad, basada en el control del
dinero, los sistemas sociales y la exterminación de cualquier ideología
que no sea la que ellos dictan. La responsabilidad no es únicamente del
terrorismo socio-ideológico que practican, oficialmente aceptado.
Nosotros, los manipulados, somos responsables también. Lo son los
millones de votantes de camisa blanca y cuello levantado, de misal y
rosario, de riqueza venida a menos, de reclinatorio y opusdeifilia que
votaron, en el caso del “reino de España” a los verdaderos terroristas
actuales, los miembros, ministros, simpatizantes y políticos del
gobierno del pp.
No voy a detenerme a enumerar los sectores de nuestra realidad en
los que han logrado, y suma y sigue, inocular virus mortales con la
finalidad de darle sentido a su llegada “al poder” y su posterior
mantenimiento –ellos desearían que fuera a perpetuidad-, basada en
cuatro puntos principales:
-El revanchismo (“Ahora nos toca a nosotros, ¿qué habían creído esos malditos rojos?);
-La aplicación del principio de la bula por herencia (“Los culpables son los rojos, ¿qué esperáis que hagamos con el desastre que nos han legado?”)
-La estrategia del tartamudeo informativo,
que toma como modelo el tartajeo seseante de su líder, consistente en
no dar la información sobre recortes ni medidas más que a golpecitos,
tartamudeando (“se tratará de medidas que mitigarán el problema y
provocaran la mejora del sector”, qué medidas y cómo provocarán las
mejoras ya queda para el siguiente capítulo, con un poco de suerte, que
nunca llega)
-El uso reiterado del principio maquiavélico de “el fin justifica los medios”,
que, en versión rajoyniana, se traduce por “eliminemos cualquier medio
para que éstos lleguen a buen fin”. Todos los sectores sociales,
absolutamente todos, están ya infectados con la bacteria de un nuevo
fascismo, más sutil que el del señor bajito con bigote que pasaba
temporadas en su pazo, unida al virus de la ambición desmedida de la
banca.
Aunque cualquier pieza del puzle de nuestra sociedad está
letalmente dañada desde que el gobierno del pp nos “representa”, la
educación, lo que queda de ella, constituye una de las más lacerantes
heridas que estamos sufriendo. Estos buitres del pp, desalmados miembros
de un clan extenso donde se reúnen socios de una ideología en la que
predomina una máxima que ellos justifican basándose en Darwin y la selección natural de las especies: si para el científico del siglo XIX la
naturaleza selecciona las especies mejor adaptadas para sobrevivir y
reproducirse, para estos lerdos-con-cargo el pp, la derecha, ELLOS, son
los que han de seleccionar a quienes han de sobrevivir. Obviamente, la
selección artificial que aplican es fácil de comprender: ELLOS eligen a
los SUYOS para TODO. Respecto al resto, a “esos”, a nosotros” nos
aplican técnicas de tortura progresiva (ellos les llaman “medidas”,
“recortes” o “ajustes”).
Como decía, estos lerdos-con cargo (muchos de ellos ni siquiera
fascistas sino simplemente oportunistas) pretenden a través de la
educación convertirnos en
replicantes, como es lógico, Anti-Batties. A pesar de su demostrada ignorancia e ineptitud de acción sobre
temas económicos (nombraré el expediente Bankia o el misterio del agujero predecible que ellos sospechosamente no predijeron) y
sociales
(recortes en sanidad; castigo a la mujer roja y rebelde que se atreve a
quedarse embarazada, ya sea violada o madre de un futuro ser con
lesiones, y desearía tener LA POSIBILIDAD de abortar; premio a los ricos
que, sin necesidad de acudir a Viajes Halcón, viajan a “paraisos
fiscales” sin pagas tasa alguna y en
business class; etc.) les
estamos permitiendo atreverse a desmantelar el concepto de educación,
producto de una evolución ideológica y social del pasado en el que hemos
participado un inmenso número de docentes, teóricos, ideólogos y
pedagogos, desde la base de sus tendencias dictatoriales y fascistas y,
lo que es peor, están logrando, decretazo a decretazo, utilizar las
teorías de la educación y la escuela como elementos de reproducción
social para, como he comentado antes, crear replicantes con bajo
coeficiente de capacidad crítica, bajo índice de conocimientos
prácticos, nulos recursos para desenvolverse en la selva que ellos están
creando y con cero por ciento de poder de reacción:
replicantes-sordomudos made in PP.
Una facción del ejército de
lerdosgobernantes,
capitaneados por el Gran SuperWert sabe perfectamente, esto sí lo
tienen bien aprendido, Que la escuela toma un papel importantísimo sobre
la sociedad ya que influye de forma inevitable sobre la conciencia
social (la que ellos quieren que desaparezca), reproduciendo pautas de
conducta y liberando, o creando, barreras que dificulten la movilidad y
el crecimiento social. La escuela, la educación, desde el colegio hasta
la universidad (o lo que vaya a quedar de ella), que pretenden modelar
los
lerdosgobernantes tiene como objetivo mantener el máximo número de las condiciones de
desigualdad
(aunque pocas desigualdades quedan ya, cuando todos somos “secuestrados
presos de nuestro propio rescate”) y aegurar que ese modelo de
desigualdad y subordinación que tanto les interesa siga repitiéndose,
una y otra vez. Pienso en los planteamientos de Althuser cuando, hace ni
más ni menos que treinta y ocho años, explicaba su punto de vista sobre
la dominación ideológica que ejerce el estado sobre la sociedad, a
partir de los APARATOS IDEOLÓGICOS DEL ESTADO (estos lerdos ni se
molestan en tener “aparatos ideológicos”, los están, simplemente,
aniquilando). No fue el primero en afirmar que el estado es un actor
represor que monopoliza el poder a partir de la legitimación de la
fuerza.
Los
legionarios de Wert buscan implantarnos
su chip ideológico a partir de la transformación de la educación para
que sea un arma -que no les cueste mucho, eso sí- para fomentar el
control de la conciencia, la vuelta a las dicotomías que provocan los
conflictos (como la separación de sexos en las aulas, que con los
recortes serán grupos de 30 alumnos desmotivados, encabezados por un
profesor poco valorado y remunerado; una pizarra no-digital y libros con
textos escritos al dictado sobre las bondades de
los azules frente a las acciones diabólicas de
los diabólicos rojos), la incentivación
a los ricos y a los obedientes y un etc. interminable que no se han aventurado, y no es casualidad, a enumerar del todo
“hasta que no llegue septiembre”,
cuando el lobo. Los legionarios de Rajoy, nos pillarán mientras
rebuscamos en los contenedores para encontrar algo con que pagar los
libros de nuestros hijos y su comida.
Es desesperanzador, pero es la realidad y, personalmente, creo que el
primer paso para afrontarla no es huir de ella sino luchar por
desvestirla de cualquier disfraz que el estado y sus aparatos
ideológicos se empeñen en utilizar.
Nos tienen cogidos por el cuello con una cadena de eslabones de euros
de hojalata que aprieta cada día más (léase hipotecas, deudas,
impuestos); nos niegan hasta el torniquete, aunque nos desangremos
(léase recortes sanitarios) y para colmo nos niegan la posibilidad de
conocer, aprender a pensar y desarrollar nuestra capacidad
crítico-reflexiva (léase la exterminación de la educación de calidad
pública y. por el contrario, la opusdeización de la cultura y el acceso a
ella).
Resumiendo, estos
lerdosgobernantes,
soldaditos de Rajoy y
legionarios de Wert,
buscan engañarnos, perpetuar la manipulación y difundir la pandemia de
control y anulación. Como muestra un dato importante: el mes pasado, el
ministro chileno de educación, un personaje siniestro y destacado
think tank
de la ultraderecha chilena, viajó hasta el “reino de España” para
entrevistarse con Wert, el destripador de la educación. Curiosamente
nadie se hizo eco de esta visita, y las entrevistas consecuentes. Ningún
representante oficial emitió ningún comunicado ¿Por qué? Sencillo: Wert
planea emular al sistema educativo chileno, sistema que su homólogo, H.
Beyer, ha influenciado con sus planteamientos favorables a la
privatización, contrarios a las políticas igualitarias e inclusivas y
partidarios de anular a la escuela pública ¿Les suena?
Al leer algunos de los principios, por los que muchos hombres y mujeres lucharon, expresados ya en el
manifiesto anarquista de 1869 del Consejo Federal de la Región española, una no tiene más remedio que aceptar que estos
lerdosgobernantes
tienen la máquina del tiempo y, en lugar de avanzar, nos mantienen
hibernando, cuando no en retroceso a la prehistoria educativa:
“(…) Se propone el concepto de educación integral.
Queremos la enseñanza integral para todos los individuos de ambos
sexos en todos los grados de la ciencia, la industria y de las artes, a
fin de que desaparezcan estas desigualdades intelectuales, en su casi
totalidad ficticias, y que los efectos destructores que la división de
trabajo produce en la inteligencia de los obreros, no vuelvan a
producirse.
(…) Interés por extender la educación transformadora, concretada en
planes, como el programa de educación popular que el sevillano
Trinidad Soriano
propone, que contempla escuelas donde se practicaría la enseñanza
integral, además de una red de bibliotecas, museos, laboratorios; etc.
O en las propuestas de la Escuela Moderna, de
F. Ferrer i Guardia (1930)
-Hacer que los niños y niñas lleguen a ser personas instruidas, verídicas, justas y libres de todo prejuicio.
-Promover el laicismo, repudiando toda enseñanza religiosa y combatiendo la superstición.
-Coeducación de sexos y de clases. (…)