lunes, 30 de septiembre de 2013

"NOS HAN TRAICIONADO PERSONAS Y ORGANIZACIONES QUE SE DICEN DE IZQUIERDAS"

Los Familiares de los Fusilados de San Lorenzo se reafirman en su ruptura con el alcalde Cardona:
Lunes, 30 de septiembre de 2013
Por Cristóbal García Vera - Canarias-semanal.org

            El pasado jueves, 26 de septiembre, el pleno del ayuntamiento de Las Palmas de G.C. aprobaba por unanimidad, aunque tras un largo debate, la moción presentada por el grupo del PSOE  para recordar a los Fusilados de San Lorenzo durante la dictadura franquista con la colocación de una placa en el cementerio de Vegueta. La moción contempla, igualmente, el compromiso por parte del consistorio de facilitar los trámites  pertinentes para exhumar los cadáveres de alrededor de 60 republicanos, asesinados tras el levantamiento militar de 1936, que podrían encontrarse en una fosa común de este cementerio.  Una reclamación efectuada insistentemente por los familiares de estas víctimas del franquismo que hasta la fecha había sido rechazada tanto  por los tribunales españoles como por el alcalde de la capital grancanaria  Juan José Cardona.
   Tras conocer la noticia, la Plataforma de Familiares de los Fusilados de San Lorenzo emitía un comunicado en el que expresaban "su satisfacción y moderada alegría" por el acuerdo alcanzado por los grupos municipales.  “Con la aprobación de esta moción -dicen - se ha dado un paso más en la recuperación de una memoria que jamás debió perderse, en aras de que la democracia de verdad llegue por fin a un estado heredero directo del anterior régimen, que todavía no ha sido capaz de demostrar que por sus venas no sigue corriendo la sangre del fascismo".
  "Creemos que ha sido la presión mediática y social  la que ha obligado al alcalde Cardona a ceder y aceptar la moción presentada"- aseguraban posteriormente desde la Plataforma a Canarias Semanal.
LOS FAMILIARES CREAN SU PROPIA COMISIÓN TÉCNICA AL MARGEN DEL AYUNTAMIENTO 
  Esta circunstancia, sin embargo, no ha modificado su decisión de romper las negociaciones con el grupo de Gobierno del Partido Popular en el consistorio capitalino. Una determinación que, como se recordará, adoptaban el pasado 4 de septiembre, después de que
“Le dan la razón  a los que llenaron los pozos, simas y cunetas de luchadores por la libertad y nos acusan a los familiares de ser radicales de izquierda……cosa que nos enorgullece”
representantes de la Plataforma mantuvieran ese mismo día una tensa reunión con el primer edil ultraconservador que, en un principio, se había negado a admitir su solicitud para recuperar los restos de sus parientes. 
    Al término del encuentro, los familiares denunciaban que Cardona había dedicado la mayor parte del mismo a atacar violentamente a uno de los miembros de su colectivo, empleado del ayuntamiento y nieto del sindicalista Francisco González Santana.  Una de las víctimas de la represión fascista cuyos restos podrían encontrarse en la fosa común del cementerio de Las Palmas.
    De acuerdo a lo relatado por los asistentes a la reunión, el alcalde llegó a amenazar con despedir a este trabajador público por su actitud reivindicativa dentro y fuera del consistorio. Los familiares de las víctimas del franquismo relataron, igualmente, cómo el primer edil se condujo de manera "despótica" durante la reunión, vetando varias de sus intervenciones.   "Cardona se centró solamente - manifestaron luego - en alguien que parece ser más de su confianza. El historiador Sergio Millares Cantero".
  “Para nosotros  -explica la portavoz de la Plataforma Pino González - fue muy grave lo sucedido en esa reunión. Por eso hemos roto con este consistorio y constituido una comisión técnica de historiadores, antropólogos, arqueólogos, forenses, etc., al margen del Ayuntamiento". "Esta es nuestra posición - añade otro de los familiares - y no la vamos a modificar a menos que Cardona pida excusas públicamente por sus insultos y amenazas. Algo que, francamente, nos parece altamente improbable que suceda".
"IZQUIERDA UNIDA HA MANTENIDO NEGOCIACIONES CON EL AYUNTAMIENTO A ESPALDAS DE LOS FAMILIARES"
   Juan José Cardona y el grupo de Gobierno del Partido Popular, sin embargo, no son los únicos que han recibido la reprobación de los  Familiares de los Fusilados de San Lorenzo
  "En este arduo y proceloso camino - asegura Pino Gonzáleznos hemos encontrado con todo tipo de presiones, amenazas y hasta traiciones de personas y organizaciones que, en algunos casos, se definen ante la opinión pública como de izquierdas".
    En este mismo sentido, la Plataforma aseguraba el pasado lunes 16 de septiembre que "personajes que solo buscan sacar tajada de la lucha por la memoria y la reparación" estaban conminándoles a  reconsiderar su postura con respecto al alcalde de Las Palmas de G.C. "Tratan de que volvamos a sentarnos a negociar con quien nos humilló, nos amenazó, nos trató de meter el miedo en el cuerpo para que no sigamos luchando, de repetir los escarnios que hemos vivido durante 75 años de represión y fascismo" - manifestaban en otro comunicado.
   Interrogados a este respecto,  los miembros de la Plataforma no mostraron reparos en aclarar a Canarias Semanal hacia quién iban dirigidas sus críticas. "Estamos especialmente decepcionados con Izquierda Unida - dicen - hasta el punto de que también hemos roto nuestras relaciones con esa formación política".
    Y es que, según denuncian desde la Plataforma de Familiares de los Fusilados de San Lorenzo, miembros de Izquierda Unida Canaria habrían estado "manteniendo contactos con el equipo de Juan José Cardona, a espaldas de los familiares". Una circunstancia que  -sostienen - les obligó a ponerse en contacto con esta organización, para exigirles que renunciaran a seguir  arrogándose, ilegítimamente, la representación de las víctimas.
   Desde la Plataforma de Familiares se muestran especialmente indignados por la respuesta  a esta demanda que – según afirman – obtuvieron de IUC.  
  "Le dan la razón a los que llenaron los pozos, simas y cunetas de luchadores por la libertad y nos acusan a los familiares de ser 'radicales de izquierda'. Cosa – aseguran - que nos enorgullece, ya que la única forma de salir de esta corrupta dictadura es con una verdadera revolución. De lo contrario estaremos condenados a ver morir a nuestros hijos de hambre y miseria".
   "Nos ha traicionado una gente que nunca se había preocupado por  nuestro caso y que ahora pretende hacerse la foto, y monopolizar todo lo que se haga, únicamente  para obtener réditos electorales"  -aseguran desde la Plataforma de Familiares de los Fusilados de San Lorenzo.
   En  cualquier caso – concluyen  - “ahora nuestra intención es seguir luchando hasta el final. No arrojar la toalla en ningún momento, ya que esta lucha es muy larga y no terminará con la recuperación de los huesos y la instalación de esta placa en el cementerio de Las Palmas de Gran Canaria. Todavía queda mucho camino hasta la lograr la dignificación y reconocimiento histórico de todas las víctimas del franquismo. En Canarias y en el conjunto del Estado".







EL SOCIALISMO: ¿UNA EXPERIENCIA HISTÓRICA FALLIDA?


Artículos de Opinión | Manuel Navarrete* | 29-09-2013 |
 El progre vulgaris razona más o menos de la siguiente manera: todo lo que dicen los medios de comunicación sobre nuestras manifestaciones, sobre Palestina, sobre la reforma laboral, sobre la huelga general y sobre la banca es mentira, está lleno de manipulaciones y tendenciosamente falseado. Pero cuando estos medios de comunicación hablan sobre países socialistas, entonces dejan de ser empresas privadas con intereses capitalistas y pasan a ser los portadores de la verdad absoluta. Todo lo que digan, hasta lo más disparatado y surrealista, es real y no hay nada más que hablar.
El progre vulgaris sólo tiene memoria histórica para la derrota; jamás para la victoria. Cuando se trata de recordar aquellos países en los que se produjeron heroicas y masivas revoluciones sociales, se derrocó al poder de la burguesía y se inició, con todas las dificultades del mundo y más, la construcción socialista, entonces, misteriosamente, deja de haber una memoria alternativa que reivindicar, y basta con servirse de lo que nos ofrecen los medios convencionales, cuya versión, acríticamente aceptada como la verdad, nadie pone en duda.
Es prácticamente imposible no pensar que estamos tirando piedras contra nuestro propio tejado, cuando vemos a la gente de izquierdas más preocupada por satanizar algo tan poco peligroso en la actualidad como “la burocracia soviética” que por denunciar la dictadura bancaria y burguesa que deteriora nuestras condiciones de vida actuales a pasos agigantados.
Si el problema fundamental de la humanidad es el de proporcionar a los oprimidos pan, trabajo, vivienda, educación y salud, entonces podemos afirmar literalmente que el socialismo realmente existente (¿cuál si no, el inexistente?) solucionó las problemáticas más acuciantes de nuestra especie, haciendo del planeta un lugar más justo, digno y esperanzador.
Soslayar los logros sociales de los países socialistas, o minimizarlos como si fueran “algo secundario”, es una falta de respeto para todos aquellos que dieron su vida para acabar con la explotación de la burguesía, para todos aquellos que hoy día mueren y matarían por acceder a los estándares de vida logrados en el campo socialista e incluso para nosotros mismos.
Los complejos inducidos son funcionales para el sistema, porque nos hacen renegar de todo aquello que realmente hace daño al sistema (véanse las terribles manipulaciones que han equiparado, en la conciencia de muchos compañeros, guerrilla con “terrorismo”, cuando este último, en realidad, sólo puede ser ejercido desde el Estado). Sí, debemos insistir: la URSS, la China Popular y Cuba le hacen más daño al sistema capitalista que miles de foros sociales, manifestaciones pacíficas (léase folklóricas) o “cuartas internacionales” obreras.
Reivindicar con orgullo los logros sociales de aquellos países que integraron el campo socialista es un ejercicio básico de memoria histórica que debería ser obligatorio para todos aquellos que luchamos contra el sistema, si queremos que todos aquellos que sufren sus efectos cobren conciencia de que existen alternativas reales.
No podemos ocultarle a quienes padecen los efectos de la especulación inmobiliaria que en la URSS de 1990 se pagaba el mismo alquiler por una vivienda que en 1928; el mismo pago por electricidad, calefacción y teléfono que en 1948; el mismo billete de metro que en 1932; lo mismo en productos alimenticios que en 1950.
No podemos ocultarle a un país como el nuestro, cuya esperanza de vida, dados los efectos catastróficos de la crisis capitalista, comienza a disminuir aceleradamente, que en la URSS la esperanza de vida era de 34 años en 1923 y sólo en las tres primeras décadas de revolución socialista se consiguió elevarla hasta los 70.
No podemos ocultar en un país que, como éste, niega los derechos nacionales más elementales que la URSS dio forma escrita a 48 lenguas que bajo el zarismo no la tenían; que en 1990 se editaban obras en 77 idiomas soviéticos.
El purismo ideológico y dogmático no puede llevarnos a negar la más elemental justicia analítica y el más básico rigor conceptual. Por ello, es imperativo reconocer los logros de la revolución socialista en una China Popular que, desde 1949 hasta 1976 (fecha de la muerte de Mao), duplicó su esperanza de vida: de 32 a 65 años. ¿A qué nos lleva ocultar que en 1970 Shangai tenía una tasa de mortalidad infantil menor que Nueva York? ¿Por qué deberíamos ocultar que la China de Mao formó a 1’3 millones de campesinos como médicos rurales para atender las necesidades sanitarias en el campo?
¿Y Cuba? ¿Qué adelantamos haciendo que nuestro pueblo trabajador ignore que Cuba erradicó el analfabetismo en 1961, en sólo 2 años de revolución? ¿O que ha erradicado la desnutrición infantil y exhibe la esperanza de vida más alta del llamado Tercer Mundo (78 años) y la tasa de mortalidad infantil más baja de América Latina (4’7 por cada mil nacidos vivos), incluso por debajo de la de EE UU?
¿Por qué no hablar a los trabajadores, con orgullo socialista, de programas cubanos como el “Yo sí puedo”, que ha liberado de analfabetismo varios países latinoamericanos (Venezuela, Nicaragua, Bolivia), o la “Operación Milagro”, que ha curado la vista de forma gratuita a más de 1’5 millones de personas de más de 20 nacionalidades empobrecidas? ¿Es mejor exportar invasiones militares y multinacionales saqueadoras, como hacen los EE UU?
¿Por qué no defender con orgullo la superioridad material y moral del socialismo, cuando en los países del Este, tras la restauración del capitalismo, el producto interior bruto y los bienes y servicios medios han disminuido en un 10%, en sólo una década, lo que supone una pérdida efectiva de un 40% de poder adquisitivo?
Si en la Rusia del año 2000 el PIB había caído un 33% en sólo una década de capitalismo; si en 1917 el PIB por habitante en la posterior zona URSS alcanzaba un 10% del de EE UU, y sin embargo en 1989 lo había superado en un 43% (a pesar de la devastación que supuso la invasión nazi-fascista); si hoy día, por culpa del capitalismo, la URSS ha retrocedido un siglo y su PIB por habitante vuelve a ser inferior al de EE UU… entonces, ¿por qué condenar a la Unión Soviética sigue siendo preceptivo y obligatorio para entrar en el club de los “bien pensantes” y obtener el derecho a ser escuchado en determinados círculos?
Si, en la URSS, gracias al socialismo el número de estudiantes a tiempo completo se multiplicó por seis; las camas de hospital casi por diez; los niños atendidos en guarderías, por 1.385; si el número de médicos por cada cien mil habitantes era de 205, comparado con los 170 en Italia y Austria, los 150 en EEUU, los 144 en la Alemania capitalista, los 110 en Gran Bretaña, Francia y Holanda y los 101 en Suecia (tan admirada por socialdemócratas y amigos del “capitalismo con rostro humano”); si la esperanza de vida se duplicó y la mortalidad infantil se redujo a una novena parte; si, en 1972, el número de médicos había aumentado desde 135.000 a 484.000 y el número de camas de hospital de 791.000 a 2.224.000, entonces, ¿cómo considerar que la sociedad burguesa es más humana que la sociedad socialista?
¿Por qué hacer énfasis únicamente en las imperfecciones y supuestos defectos de esta última, simplificando además la cuestión sin tener en cuenta ningún factor contextual o político?
Hay realidades innegables, cuya negación u ocultación constituyen un crimen. Bajo el socialismo, los equipos sociales eran sobresalientemente altos. Había una altísima seguridad social de base. El empleo a tiempo completo estaba garantizado para toda la vida. Muchos bienes de consumo y servicios básicos eran subsidiados. A nadie le faltaba alimentación, vestido o vivienda. El acceso a la sanidad y la educación eran gratuitos. La pensión estaba asegurada.
Eso por no hablar de las manipulaciones históricas. Lejos de ser una “contrarrevolución burocrática”, como algunos gustan de afirmar, los años 30 supusieron en la URSS una época de promoción técnica y política sin precedentes para millones de obreros y campesinos humildes, que tomaron en las manos su propio destino.
¿Significa esto que los países del campo socialista fueran perfectos o no deban criticarse? No. Lo que significa es que la crítica efectuada, por ejemplo, por el trotskismo es una crítica superficial y frívola, que tiene el terreno abonado en la demonización mediática del socialismo y que únicamente sirve para “echar balones fuera”, partiendo de una visión idealizada y antidialéctica de la realidad, como si el socialismo no sufriera contradicciones o problemas, sino que todo fuera únicamente “culpa de otros” (o, para concretar, de Stalin). Como si supusiéramos por ejemplo que, bajo Trotsky todo habría sido armonía y la colectivización y la lucha contra los terratenientes (o incluso la derrota del imperialismo nazi) habría podido llevarse a cabo sin ejercer ninguna violencia.
Por supuesto, esto no casa con el hecho de que Trotsky reprimiera con ferocidad la rebelión de Kronstadt en 1921, o propusiera militarizar los sindicatos y subordinarlos al Estado en el IX Congreso (1920) y reafirmar la dictadura del partido por encima de los soviets en el X Congreso (1921). Nada de eso importa, porque, más allá de la historia real, los bien pensantes necesitan una mitología simplificadora que le permita conectar con los prejuicios inducidos que padece la gente llana, reforzándolos y generando derrotismo. Un oportunismo que, por otra parte, tampoco les ha llevado a ninguna parte, como prueba el hecho de que no hayan encabezado ningún proceso revolucionario en toda la historia.
No seamos unilaterales. Es posible ser críticos desde el apoyo, sin incurrir en el personalismo y la superficialidad. Hay que hablar de los insuficientes canales de participación popular habilitados. De los insuficientes esfuerzos hechos para superar la contradicción entre el campo y la ciudad, así como para superar la contradicción entre trabajo manual e intelectual. Aún más grave: de las medidas de mercado implementadas en los años 50, que, como denunció el Che Guevara, generaron una crisis de conciencia e impidieron la construcción del hombre nuevo. De que todo esto llevó a que, en 1991, la URSS fuera destruida sin que las clases obrera y campesina dispararan un solo tiro para defenderla, lo que nos indica que la gente había dejado de creerse protagonista de la construcción socialista.
Se nos impone ser críticos sin ser insensatos, generar una memoria histórica de los oprimidos y reivindicar las experiencias sociales más avanzadas de la historia humana, recordando aquella cita de Lenin que venía a decirnos que un solo paso “realmente existente” de la clase obrera vale más que mil programas perfectos y refinados.

(*) Manuel Navarrete es profesor de Lengua y Literatura. Licenciado en Filología Hispánica, Máster en Profesorado y Máster en Estudios Americanos por la Universidad de Sevilla (Andalucía). Activista de los movimientos sociales y del sindicalismo alternativo y de clase. Pesimista de la razón y optimista de la voluntad.  Amigo de la Revolución Cubana y de los procesos emergentes y antiimperialistas en América Latina, realiza sus estudios de doctorado sobre la figura de José Carlos Mariátegui. Enemigo de la Ley de Partidos y de toda la legislación represiva. Ha participado como coautor en los libros "Bolonia no existe" (Hiru) y "Sastre, compañero" (Txalaparta).
Título original: "Memoria histórica de la construcción socialista".





LOS LADRONES NOS GOBIERNAN ¿QUÉ ESPERAMOS?


Artículos de Opinión | Carlos Martínez* | 29-09-2013 | 
Cuando el PP venció las elecciones pasadas gracias a los errores, miedos y traiciones de Rodriguez Zapatero, muchas y muchos si sabíamos lo que acabaría ocurriendo y entre ellos la cúpula del PSOE, que con el cambio constitucional del artículo 135 bis, dejó el camino expedito a los recortes y los copagos varios. El 135 bis sitúa el pago de la deuda por encima de los derechos humanos ¿Luego de que nos extrañamos?

El PP tenía un programa falso y un Plan B que ha resultado ser un Plan A, pero eso ya se sabía, el problema es que faltaban los instrumentos políticos para frenarlos y la autoridad moral para callarlos, por parte de otro partido. Ahora, estamos solos y solas en la arena y delante del toro derechista, es pues nuestra responsabilidad y coraje.
Hemos de decir alto y claro que la crisis del 2008 no ha sido sino una oportunidad para destruir todos los avances logrados por el movimiento obrero, por la lucha de clases desde finales del siglo XIX hasta nuestros días. Es la reconquista del capitalismo de lo que perdió ante las luchas sindicales y políticas obreras ya fueran reformistas o revolucionarias. Es su reacción ante lo que tuvieron que ceder tras la derrota del fascismo europeo. Es el rearme de los ricos para ser más ricos y tener el poder. El poder absoluto.
En el mundo la llamada “comunidad internacional” es decir las potencias centrales capitalistas, están en retirada. Hay una guerra monetaria y comercial y Occidente judeo-cristiano, la está perdiendo. Por eso ahora sus nuevos esclavos somos otra vez las clases populares occidentales, europeas, blancas y cristianas. Los obreros y obreras del Occidente, de Europa, de España, somos sus nuevos criados sin derechos para que ellos puedan competir y seguir enriqueciéndose en un mundo que se les escapa.
No son sino vulgares ladrones que nos roban nuestra salud, educación, jubilación, trabajo digno, para mantener sus bancos, saldar sus deudas, las suyas, no la deuda pública, eso es mentira, la deuda la han generado ellos.
El PP es el partido de los ricos. Pero todavía no ha surgido con fuerza el partido de los pobres. Los pobres somos nosotras, las clases trabajadoras, las y los que creen fatuamente ser de “clase media”. Pero mientras tanto, tenemos los movimientos sociales, las plataformas de resistencia y los sindicatos. A pesar de todos los pesares.
A los sindicatos que afirman ser todavía mayoritarios hay que exigirles más lucha, compromiso, activismo y pedagogía social y de clase. Si no saben hacerlo –es humano, pues llevaban años sin movilizar- que pregunten. Los nuevos movimientos sociales, deben ser conscientes de sus limitaciones, pero también de que las cosas no se solucionan con manifestaciones limitadas y pequeñas concentraciones y desconfianza, mucha desconfianza. Hace falta fraternidad, educación popular y convergencia. Menos cálculos y más sacrificios. Más ejemplo personal y más decisión. Cuando hace años se renunció a la lucha de clases, se dejó el camino abonado a los ladrones que ahora nos dominan y los banqueros que nos atracan. Cuando se dejó de hablar claro, las clases populares, el pueblo se quedó huérfano y se sintió solo muy solo.
La maldita modernidad que sustituyó a las ideas y le fe en un mundo nuevo fueron sustituidas por la gestión eficiente. Que resultó ser muy eficiente, pero para banqueros, poderosos, grandes industriales, grandes comerciales y grandes mafiosos que no pagan impuestos y encima tienen la desvergüenza de afirmar que el estado social es inviable y no puede mantenerse.
Hay que ir a los barrios y a los pueblos y decir alto y claro que mienten como bellacos y nos confunden para robarnos. Que si hay dinero, hay de sobra, pero lo tienen ellos y para ellos, para sus yates, sus fincas, sus putas, sus queridos, sus chalets de lujo, sus múltiples vacaciones, sus reyes inútiles y vagos.
Solo les frenaremos si nos temen. Basta de paños calientes. Somos más, muchas más. Pero nos tienen aborregados frente al televisor que cuenta mentiras, nos engaña y nos divide.
Solo acciones valientes, decididas y la preparación ya de una huelga general indefinida con el correspondiente trabajo de educación previo imprescindible nos pueden sacer de encima a esa piara de chorizos que nos gobierna. Pero sin sectarismos, sin recetas grupusculares, sin dirigentes de café. Unión, acción y valor. Decisión para el cambio.
Hay derrotistas que dicen: mirad a Grecia, múltiples huelgas generales y nada. Mentirosos cobardes, en Gracia están levantando una fuerte resistencia y tienen alternativa política propia y construida en las luchas y la confluencia. Aquí todavía NO HAY NADA SEMEJANTE. Pero debemos construirlo y es urgente el hacerlo.
Este otoño no debe ser caliente, debe ser ardiente.
Congelan y bajan las pensiones. Nos roban las becas. Nos hacen pagar las medicinas en las camas de los hospitales. Nos despiden cuando les da la gana aún ganando dinero ¿Y qué pasa? Nada. Encima las compañías eléctricas nos suben la luz a pesar de sus ganancias y este invierno mucha, mucha gente pasará frio en sus casas y volverán los braseros de picón y nada de nada. Ya ha llegado la hora de plantar cara. Ha llegado la hora de la dignidad. Ha llegado la hora de que paradas, parados, pensionistas, que no tenemos nada que perder nos rebelemos.
Gentes pobres, humildes, no les hagáis caso, no os creáis sus patrañas, solo os quieren, nos quieren robar.
Pero sabed gentes esquilmadas y engañadas que si tenemos alternativas, si sabemos lo que hay que hacer, si tenemos esperanza en el reparto y sobre todo que si es posible vencerlos.
*Carlos Martínez es politólogo y activista social


domingo, 29 de septiembre de 2013

LEOPOLDO Y JUAN NO PUDIERON DECÍRSELO A LA ONU

Olivia Carballar / Sevilla / 29 sep 2013
Leopoldo Iglesias Macarro y Juan Pérez Silva.
Ni Juan ni Leopoldo pudieron acercarse el sábado a un hotel de Sevilla a contar su historia. Y no pudieron hacerlo porque ya están muertos. Juan Pérez Silva murió buscando a su madre. Leopoldo Iglesias Macarro falleció luchando por dignificar públicamente la lucha antifranquista. Ellos, como muchísimas otras personas que se han ido de este mundo sin encontrar la justicia que llevaban reclamando toda su vida, no pudieron decírselo a la ONU.
Juan Pérez Silva: “Encontrar a mi madre. Ese es el paso más gordo y creo que no se va a dar”

“Me da pena que se haya producido tan tarde”, contaba Juan hace unos años desde su teléfono fijo, en su casa de San José del Valle (Cádiz), sobre el reconocimiento oficial de la muerte de su madre. Su madre era María Silva, Libertaria, superviviente de la matanza de Casas Viejas, asesinada por los golpistas en agosto de 1936. El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Chiclana de la Frontera (Cádiz) declaró, 75 años después, su fallecimiento legal y ordenó la inscripción de su muerte en el Registro Civil. Tras la sublevación del 36, se dictaron órdenes específicas para no registrar a las víctimas con la clara intención de dejar el menor rastro posible y todavía hoy sigue costando sudores hacerlo.
Juan Pérez Silva vivió para ello, para encontrarla. Recorrió juzgados y fue de un lado a otro a pesar del cansancio, la desesperación, el cierre de puertas en las narices. Él sólo tenía 13 meses cuando mataron a su madre, embarazada en aquel momento. En su voz, ya anciana, se notaba el hartazgo mezclado con el miedo a morir sin conseguir la justicia, la verdad y la reparación. “El caso de Juan, que habría venido sin duda a contárselo a la ONU, es uno de tantos miles en los que la falta de política decidida en la recuperación de la memoria histórica ha concluido con su propia muerte sin haber podido cerrar los duelos de sus familiares asesinados“, explica el historiador José Luis Gutiérrez, autor del libro Casas Viejas. Del crimen a la esperanza. Juan perdió también a su padre, Miguel Pérez Cordón, asesinado en Cartagena, del que al menos supo dónde habían enterrado sus huesos.
María Silva, Libertaria.
María Silva, Libertaria.
Cuenta el periodista Antonio Ramos que sólo dos meses antes de fallecer, Juan plantó en el patio de la casa de Blas Infante un rosal, en recuerdo a aquel otro que floreció, traído aún con ascuas, por el Padre de la Patria Andaluza desde Casas Viejas. “Poco a poco empezó a perder la esperanza en encontrar los restos de su madre y en que el supuesto interés de las instituciones por la memoria histórica fuera algo más que una moda pasajera”, escribe Salustiano Gutiérrez.
El sábado, Juan no pudo poner a su madre como ejemplo de quienes sufrieron una doble muerte, la real y la de esfumarse de la historia. Ni pudo contar que le quedaba lo más difícil: encontrar su cuerpo, uno de los casos que iba a investigar Baltasar Garzón. “Ese es el paso más gordo y creo que no se va a dar”, aseguró poco antes de morir. No pudo decírselo a la ONU.

Leopoldo Iglesias Macarro: “La lucha continúa mientras no encontremos a los 150.000 desaparecidos en las cunetas. La búsqueda de sus asesinos también”


“La Ranilla tenía capacidad para 300 o 400 personas y yo te puedo asegurar que cuando entré en el año 1949 allí había más de 3.000 personas. Para que te hagas una idea, en las celdas, que en principio eran individuales, podían llegar a haber siete u ocho presos. Sin muebles, dormíamos en el suelo y sólo contábamos con un agujero en una esquina para hacer nuestras necesidades a la vista del resto”. ¿Y cómo  logró sobrevivir? “Gracias a la comida que nos enviaban de fuera y a la Organización Socorro Popular Antifranquista, que evitó por todos los medios que ninguno de los presos  políticos muriéramos de hambre”. Lo cuenta Leopoldo Iglesias Macarro en una entrevista en Casco Antiguo, en 2007, recogida en todoslosnombres.org. Comenzó a vivir -continúa- cuando murió Franco. Falleció hace sólo unos meses en Sevilla, rodeado de amigos, con los cantos de La Internacional. Él tampoco pudo decírselo a la ONU.
Leopoldo, que también fue Gabriel y Bruno -nombres para escapar del control franquista- fue un activo militante comunista, enlace de la guerrilla, que no descansó ni un día en su afán por devolverle a este país la dignidad. “Mi padre decía: ‘Cuando salí de prisión no me sentía libre porque las cárceles estaban llenas de compañeros; hasta que no salga el último, yo también me sentiré preso‘. Y después, siguió repitiendo: ‘La lucha continúa mientras no encontremos a los 150.000 desaparecidos en las cunetas…’. La búsqueda de sus asesinos también continuará…”, recuerda Pepe Iglesias, su hijo, que lleva consigo el trabajo de padre. “Gente como él, desde las asociaciones de expresos y represaliados antifranquistas, inició ese trabajo. Es un legado que nos corresponde continuar. Y parece que, al final, lo vamos a ir consiguiendo. Sólo puedo estar orgulloso de su dedicación y vivir la vida con las ausencias”, añade Pepe, que atiende a Andalucesdiario.es desde el mismo sitio donde ayer habría estado también Leopoldo: en Madrid, en el acto de homenaje a Gervasio Puerta, histórico presidente de la Asociación de expresos y represaliados políticos.
Pepe no sabe qué le habría dicho su padre a la ONU, pero sí está seguro de una cosa: “Estaría contento, mi padre habría disfrutado con esta noticia. Este es un país que está teniendo un comportamiento miserable con esa generación ejemplar de hombres y mujeres. Es lamentable que el genocidio se haya tenido que investigar desde Argentina, mientras que aquí el Estado ha puesto todo su esfuerzo en echar del sistema a los jueces y fiscales que se han preocupado por investigar los crímenes del franquismo”. Pepe es rotundo: “No van a extraditar a nadie, eso lo sabemos, pero algunos asesinos y torturadores van a salir a la calle señalados. Recordemos que hace ya unos años la ONU censuró al Gobierno español por no cumplir la Ley de la Memoria Histórica, sólo que hoy la situación es mucho peor. Este gobierno ultraderechista ha cerrado la oficina de víctimas del franquismo y ha condenado a la muerte por falta de medios a la Ley de Memoria Histórica. A muchos les robaron la niñez, la adolescencia, la juventud, la vida… Y quieren seguir manteniéndolos enterrados”, concluye. Ni su padre quería abrir heridas. Ni él tampoco: “Lo que queremos es cerrarlas”.
Fuente: http://www.andalucesdiario.es/

EL GOBIERNO IGNORA LA SUGERENCIA DE IU DE RENDIR EL HOMENAJE PENDIENTE A LOS PRESIDENTES DE LA REPÚBLICA

Llamazares subraya que Alcalá-Zamora y Azaña son "personajes históricos que siguen esperando el reconocimiento social e institucional que se merecen"
EUROPA PRESS Madrid 29/09/2013 12:02 Actualizado: 29/09/2013 13:20
Gobierno Provisional del 14 de abril de 1931. En el centro, Manuel Azaña y Niceto Alcalá Zamora.
Izquierda Plural instó al Gobierno a aclarar si piensa rendir algún homenaje institucional a los presidentes de la II República Niceto Alcalá Zamora y Manuel Azaña, que a su juicio está pendiente pese a haber sido ambos Jefes de Estado, pero el Ejecutivo ha ignorado la sugerencia limitándose a señalar que en el futuro, si se organiza algo, ya se informará.
La petición fue formulada por el diputado de IU por Asturias, Gaspar Llamazares, quien considera que Alcalá-Zamora y Azaña son "personajes históricos que siguen esperando el reconocimiento social e institucional que se merecen", máxime cuando se trata de Jefes de Estado democráticos. Hasta ahora, el homenaje más relevante que han recibido ha sido la colocación de sendos bustos en el Congreso en 2012. "Y es hora de que la democracia española, y las generaciones actuales, honren y recuperen para siempre su memoria --pedía--. Nuestro país, nuestra democracia, tienen un deber moral, un deber de justicia y un sentido ético que deben sustentarse en el conocimiento reposado y riguroso del pasado siglo. No se trata de abrir heridas, sino de cerrarlas de forma definitiva".
En su pregunta, Llamazares hacía especial hincapié en la figura de Alcalá Zamora, que no era precisamente comunista, sino miembro de Derecha Liberal Republicana y posteriormente fundador del Partido Republicano Progresista. Pero el Gobierno desoye la petición de IU y se limita a reseñar, en una contestación parlamentaria, que "el Gobierno valora los distintos periodos democráticos y constitucionales de la Historia de España, así como la figura de los Presidentes de los Gobiernos constitucionales y democráticos que ha tenido en cada uno de esos momentos".
Según explica el Ejecutivo en su respuesta a Llamazares, lo "habitual" es que, con ocasión de determinadas efemérides de carácter cronológico, se desarrollen actividades de recuerdo y homenaje a esos periodos y figuras, lo que se hizo en 2012 con el Bicentenario de la Constitución de Cádiz. "Como es natural, el Gobierno informa de dichas iniciativas a la opinión pública, lo que se hará también en el futuro, cuando estén decididas y planificadas".
Llamazares llegaba a poner sobre la mesa una serie de fechas que podrían haber suscitado la organización de un homenaje aprovechando una efeméride: Así, Alcalá Zamora nació en 1877 (ya se han cumplido 136 años), fue elegido presidente de la República en 1931 (82 años), dejó la Presidencia en 1936 (77 años transcurridos) y falleció en 1949 (64 años).

EL FISCAL ENSAYÓ CON 'BILLY EL NIÑO' CÓMO BLINDAR A MARTÍN VILLA

El argumento para no detener al policía acusado de torturas, listo para aplicarse al exministro de Gobernación o al suegro de Ruiz-Gallardón
ANDRÉS MUÑIZ Madrid 29/09/2013 08:41 Actualizado: 29/09/2013 11:16
El exministro Rodolfo Martín Villa
De momento ha servido para no detener a policías acusados de torturas como "Billy el Niño"o el capitán golpista Jesús Muñecas. Pero a la Fiscalía le ha sido útil como entrenamiento para blindar a altos cargos del franquismo que también han sido querellados, como los exministros Rodolfo Martín Villa o José Utrera Molina, este último suegro de Alberto Ruiz-Gallardón, ambos señalados como partícipes en los delitos de genocidio y lesa humanidad cometidos durante la dictadura de Franco.
La Fiscalía de la Audiencia Nacional ha eludido la orden de detención inmediata dictada por una jueza argentina contra los primeros querellados por las víctimas del franquismo, el expolicía Juan Antonio González Pacheco (alias 'Billy el Niño') y el exguardia Jesús Muñecas, acusado de torturas en Euskadi antes de participar en el intento de golpe del 23-F.
El Ministerio Público --órgano jerárquico a cuyo jefe, el fiscal general, lo nombra el Gobierno-- ha alegado por escrito que, frente a lo reclamado por la magistrada María Servini, no es necesaria la detención preventiva de 'Billy el Niño' y Muñecas por cuatro motivos: "la antigüedad" de los hechos que se les imputan, la posible prescripción de los delitos,  así como lo dispuesto en la Ley de Amnistía española de 1977 para los actos cometidos con anterioridad, y, por último, debido a la falta de un relato pormenorizado de los hechos atribuidos a cada uno de los reclamados, con concreciónde fechas y lugar de comisión.
Fuentes de la Fiscalía, al comentar la lejanía en el tiempo de los crímenes del franquismo señalados en la querella de la jueza Servini, se preguntaron expresamente si tendría sentido detener de forma preventiva a una persona como Martín Villa mientras se tramita su proceso de extradición --que suele llevar varios meses--. Este leonés de nacimiento ocupó altos cargos con el franquismo y también con los gobiernos de UCD, y está querellado por la muerte de cinco trabajadores en Vitoria en la huelga de marzo de 1976, cuando era ministro de Relaciones Sindicales. Uno de sus últimos encargos públicos fue el de comisionado del Gobierno de Aznar para la catástrofe del Prestige.
La juez Servini, en el desarrollo de su investigación, podría reclamar su detención y extradición a España como ha hecho con otros querellados, y como es posible que extienda a Utrera Molina o al también exministro Fernando Suárez, excandidato electoral de Alianza Popular en varios comicios en la etapa de presidencia del partido de fallecido Manuel Fraga.
La Fiscalía de la Audiencia Nacional ya se opuso en su momento a la apertura por el juez Baltasar Garzón de la investigación en España por los crímenes del franquismo, alegando que la persecución de posibles delitos en la etapa de la guerra civil y  hasta 1975, había quedado afectada por los efectos del perdón recogido en la Ley de Amnistía de 1977, aprobada por el Parlamento español.
El fiscal de la Audiencia Carlos Bautista, en el mismo escrito en el que rechaza las detenciones, reclama la apertura del expediente de extradición a Argentina de González Pacheco y Muñecas, pidiendo a la juez documento adicional sobre sus eventuales delitos. El juez Pablo Ruz, de guardia cuando el fiscal presentó su informe, ha seguido la línea marcada por la Fiscalía, y ha adelantado --como sucede en todos casos de extradición-- que llamará a declarar a los reclamados cuando Argentina le envíe las peticiones de extradición.
Contra esa actuación de la Audiencia, han protestado los abogados de la acusación personados en la causa argentina. Aseguran que sólo procedía, una vez comunicadas a las autoridades españolas las órdenes de detención, que "por parte de la policía se detuviera a los imputados y en un plazo no superior a veinticuatro horas se los pusiera a disposición del juez instructor de la Audiencia Nacional que se encontraba de guardia, a efectos de que por parte de éste se decidiera si acordaba su prisión provisional o adoptaba cualquiera otra de las medidas cautelares previstas en las mismas".
Añaden que la decisión del juez Ruz constituye un flagrante incumplimiento de la normativa. "La detención y posterior comparecencia ante la autoridad judicial tiene el objetivo de que los imputados queden a disposición de la justicia, ya sea que se resuelva su prisión provisional, como entendemos se corresponde con la gravedad de los crímenes cometidos, las altas penas – de ocho a veinticinco años de prisión – previstas en la ley argentina y el probable riesgo de fuga, o que se adopte otra medida cautelar".
Los abogados dicen que no les sorprende la actitud de la fiscalía, por "sus antecedentes de nula colaboración con la justicia argentina en esta causa", ni la de los responsables políticos del gobierno español que han ejercido constantes presiones para evitar el progreso de la misma,  pero sí nos causa una profunda extrañeza que el juez instructor haya consentido esta evidente transgresión de la legislación aplicable.
Sin perjuicio de ello confían en que, cuando se curse la solicitud de extradición por parte del juzgado argentino, los imputados se encuentren a disposición de la justicia y que la Audiencia Nacional  adopte cualquiera de las dos decisiones que en derecho corresponden: el enjuiciamiento de los imputados en España o su extradición a Argentina.
Cualquier otra decisión implicará --según señalan en el comunicado-- dejar aún más en evidencia, nacional e internacionalmente, que el lugar en el que los imputados cometieron sus crímenes se ha convertido en el único refugio que tienen en el mundo ante la actuación de la justicia.

UNA 'MAREA VERDE' DE 90.000 PERSONAS CENSURA EN PALMA LA POLÍTICA EDUCATIVA DE BAUZÁ

Una 'marea verde' de 90.000 personas censura en Palma la política educativa de Bauzá

Una masiva manifestación, la mayor en la historia de Baleares, exige la retirada del decreto sobre el trilingüísmo y una educación pública de calidad

PÚBLICO / AGENCIAS Palma de Mallorca 29/09/2013 20:24 Actualizado: 29/09/2013 21:34
Imagen de una parte de la multitudinaria manifestación que colapsó el centro de Palma de Mallorca.

Imagen de una parte de la multitudinaria manifestación que colapsó el centro de Palma de Mallorca.ENRIQUE CALVO / REUTERS


Una marea verde de miles de personas colapsó este domingo las calles del centro de Palma de Mallorca en defensa de la educación pública. En la que, según los convocantes, es la manifestación más multitudinaria de la historia de la democracia en Baleares, cerca de 90.000 personas salieron a las calles de Palma de Mallorca para pedir la retirada completa del Tratamiento Integrado de Lenguas (TIL) que pretende imponer el Govern de José Ramón Bauzá (PP) y para apoyar la huelga indefinida de profesores de Baleares.
Bajo el lema Contra la imposición, defendamos la educación los asistentes mostraron su rechazo al proyecto del Govern balear del PP, que quiere que las asignaturas troncales se  impartan en catalán, castellano e inglés en un 30% y el resto a determinar por cada centro a partir de este curso escolar. Muchos consideran que el decreto del TIL es un ataque directo a la lengua catalana
"Es un día histórico, la mayor manifestación de la democracia en Baleares", afirmó un portavoz de los organizadores. El secretario general del STEI, Biel Caldentey, explicó a los medios de comunicación en la Plaza de la Reina, punto de llegada de la concentración, que este día ha sido "tan histórico que el Govern o se pone histérico o se pone a negociar". Caldentey añadió que este lunes cuando la Consejería de Educación se vuelva a reunir con la Mesa de negociación "sólo querremos tres respuestas a tres preguntas: retirada del TIL, retirada de la Ley de Símbolos, y retirada de los expedientes disciplinarios de los directores de Mahón".
"Tienen que rectificar cuando la parte más sana de la sociedad sale a la calle a pedir mejor educación y diálogo", 
Un sindicalista complementó el sentir general de los asistentes a la protesta: "Si les queda un gramo de inteligencia, tienen que rectificar cuando la parte más sana de la sociedad sale a la calle a pedir mejor educación y diálogo".
El rechazo a las políticas educativas del Govern de Baleares y del Gobierno central se extendió a Menorca, Ibiza y Formentera. Hasta en Barcelona centenares de personas llenaron la Plaza de Sant Jaume para mostrar su solidaridad con los docentes de las Islas Baleares, que están en huelga indefinida en protesta por el modelo trilingüe que quiere implantar el ejecutivo de José Ramón Bauzá.
Según los representantes de la comunidad educativa, de los sindicatos y de la sociedad catalana el TIL supone "un ataque sin precedentes a las condiciones laborales del profesorado, a la calidad de la enseñanza, a los derechos del alumnado y de las familias y a la normalización del catalán".
El rechazo en las calles de Palma fue masivo: se podían leer y escuchar lemas como Por una educación pública de calidad, No tenemos miedo, nosotros somos la mayoría gritona, Si los docentes adoctrinasen, vosotros no gobernaríais o No a la imposición, sí a la educación, así como otros más desenfadasos del estilo A relaxing cup de hostias contra los fachas.
La marea verde que rodeaba Palma desde Plaza España hasta Plaza de la Reina reunió a unas 90.000 personas. Para llegar a esta cifra se han utilizado datos recogidos por la Sociedad Balear de Matemátcos. El Departamento de Geografía de la Universitat de les Illes Balears (UIB) calcula que la concentración ha cubierto una superficie total de 41.000 metros cuadrados y que había algo más de dos personas por metro cuadrado. 
El acto fue convocado por la Plataforma Crida, la Assemblea de Docents, el STEI, la Obra Cultural Balear, la Uctaib, la Associació de Directors d'Educació Infantil i Primaria, la Fadesib, FAPA, Coapa, Joves per la Llengua, CCOO, CGT, Fete-UGT, Jubilats per Mallorca y Plataforma d'Estudiants de Balears.
Fuente: www.publico.es

EL MÉDICO CABANELA


Un hombre sensato el médico. Se le nota en los ojos. Él ponía mirada de ir un rato por delante de lo que le estaban preguntando

Hay que fijarse en los médicos. En sus manos, en cómo se miran ellos mismos las manos. Me fijé en el médico Cabanela, que ha intervenido al Rey. A veces me pregunté si era sensato porque era gallego o porque era médico. Debe haber una combinación sabia que le hace decir lo grave como si estuviera volando por encima de la realidad, viéndola entera, resumiéndola con la misma ligereza con que Mr. Chance le explicaba la vida, según su experiencia en el jardín, al mismísimo presidente de Estados Unidos. Bienvenido, Mr. Chance,ustedes se acuerdan de aquella película en la que Peter Sellers fue el personaje creado por Jerzy Konsinski.
Pues este Mr. Chance que le ha nacido ahora a la vida española es algo muy distinto a un jardinero, pero exhala el mismo sentido común. Él avisó, sin irse por las ramas, de que era mejor que el Rey depusiera las armas de combate, que se dejara de delirios de Rey y se pusiera a trabajar como paciente. No es una broma lo que tiene, pero si alrededor lo siguen empujando al precipicio del trabajo le puede pasar de todo. Que no se vaya ni a Vitigudino.
Un hombre sensato el médico. Se le nota en los ojos. Frente a lo que suele ser habitual entre los que se enfrentan a periodistas, al lado de las principales cabezas informativas de la Zarzuela y de colegas suyos más bien silentes él ponía mirada de ir un rato por delante de lo que le estaban preguntando. Hasta que en un momento determinado, sin otra estridencia que la de estar haciendo lo que no era habitual, se hartó de dar explicaciones y dejó sobre la mesa una respuesta de dos palabras. No se hable más.
Sorprende porque no es habitual la naturalidad en medio del acartonamiento con que se abordan las cosas de palacio. Ahora están afanados los responsables políticos de los dos más importantes partidos tratando de disminuir su inacción de años: han dejado pudrirse el debate de las leyes sucesorias y se han encontrado que la lesión del Jefe del Estado va para largo y no se atreven a decir que es urgente arbitrar el sustituto natural en la contingencia monárquica. Quien tiene que sustituirlo es el príncipe de Asturias. Todo el mundo sabe ya que está preparado, que sabe por dónde van el mundo y su mundo. Y están dando vueltas y revueltas cuando es evidente —lo dijo el médico— que su padre no está, lamentablemente, ni para audiencias.
Hace años, cuando a Pompidou se le vio que no mejoraba, los médicos le dijeron que se hiciera a un lado, y cuando finalmente ya no hubo más remedio que entender que el fin le había llegado, un periódico sarcástico sacó sus peores armas para decir a los franceses que así no se podía mandar, ni siquiera haciendo lo que tiene que hacer un Rey (que, por cierto, el médico Cabanela dijo con mucha naturalidad que no sabe qué es). Pues quien no tiene ojos para saber que desde hace rato el Rey reclama un alivio es que no quiere al Rey.
El médico gallego se ha hecho en Estados Unidos, de ahí viene su atrayente titubeo (ah, ah, ah) antes de decir las frases. Allí no se van por las ramas y él es cristalino, como las aguas que Valle-Inclán le enseñaba a Juan Ramón (“estos son rododendros, Juan Ramón, de los que usted habla tanto en sus poemas”). Lo que ha dicho en dos o tres frases de la salud del Rey ha roto aquí todos los circunloquios. A ver si le hacen caso.


BORBÓN E HIJOS, S. L.

Mientras al Príncipe se le aprecia cada vez mayor desenvoltura, al Rey se le advierten dificultades que agrían su carácter

Siempre me han atraído los negocios familiares: cómo los mayores instruyen a sus hijos desde niños en los secretos del oficio y cómo, después de que estos superan la adolescencia, van cediéndoles el paso para que en un futuro puedan gobernar la empresa. En mi familia ha habido un negocio familiar muy notable: un horno de pan que surtía de todo tipo panes, madalenas, tortas y monas a un rincón de España, el Rincón de Ademuz. Me maravillaba contemplar de niña cómo mi tío panadero iba incorporando de manera natural a mis primos en los madrugones, en la fabricación del pan o en el trato a los clientes. A pesar de que los rigores del oficio mantenían a los hijos trabajando cuando los demás estábamos de vacaciones, yo sentía envidia de esa armonía familiar, de ese esfuerzo en el que arrimaba el hombro todo el mundo.
Existían, desde luego, negocios familiares más duros que el horno, que siempre estaba caliente, aunque fuera en la madrugada del crudo invierno aragonés. Estaban los muchachos que siendo aún muy tiernos tenían que ir al campo, como mi marido, Antonio, que salía de noche con su madre a recoger aceituna en los días en que todos los chavales estaban en su primer sueño disfrutando de las vacaciones navideñas. He tenido amigos cuyos padres regentaban un bar y me maravillaba cómo con trece o catorce años sabían atender las mesas, memorizar comandas y preparar cosas sencillas en la cocina.
Hay padres que no saben vivir sin mandar y les resulta traumático aceptar que su tiempo pasó
En el Puerto de Santa María, hay un bar emblemático, el Bar Vicente Los Pepes, que conserva el sabor de los viejos bares del sur: un gran espacio con todas las puertas abiertas a la calle, mesas y sillas de madera, techos altos y paredes adornadas con carteles antiguos y fotos de gente del pueblo que se hizo célebre a nivel local, por el baile, por el cante, o simplemente por adornar a diario las calles del Puerto con su presencia extravagante. Hasta hace un año, cuando todas las señoras antes de entrar a la Plaza (el mercado) iban allí a tomar el cafelito con leche y un mollete de Antequera, reinaba en un rincón privilegiado de la sala el patriarca, el señor Vicente, quien en tiempos había estado presidiendo el mostrador y, ahora, en la vejez, disfrutaba en su trono de rey padre del orgullo de mirar, de ver cómo el negocio sobrevivía a pesar de los malos tiempos, y admiraba los cambios sutiles que el hijo había ido adoptando para adaptarse a una clientela que cambia, como cambia el mundo.
Hay un momento en todo negocio familiar, un momento crítico, con tintes melancólicos, en el que el hijo debe conducir al padre a su sillón de mirar la faena desde la barrera. Hay padres que se resisten porque los padres y las madres, cegados por un amor protector, tendemos a hacer compatible la creencia de que nuestros hijos son excepcionales con que al mismo tiempo son un poco inútiles y sin nuestra continua vigilancia no sabrán salir adelante. También hay padres que no saben vivir sin mandar, y menos sin mandar a sus hijos, y les resulta realmente traumático aceptar que su tiempo como patrón pasó y que sus descendientes pueden incluso superarles en las destrezas del oficio.
Los fieles al ‘Juancarlismo’ no entienden por qué el patrón no reconoce en su hijo un sustituto
El día en que los padres advierten que los hijos saben más que ellos se produce una especie de destronamiento tácito, que hay quien asume o quien se rebela ante esa perspectiva. Lo que ya es un completo disparate, y yo he sido testigo en alguna ocasión de esta circunstancia, es que un padre esté tan empecinado en la idea de que solo él puede llevar el bastón de mando que aun estando enfermo sea incapaz de delegar en los suyos. Hay negocios, quién no ha visto alguno, que incluso se paralizan por enfermedad del patrón y que van perdiendo poco a poco una clientela que no acaba de entender que la empresa esté en la cabeza de una sola persona. Los negocios son así, tienen sus momentos gloriosos y sus tiempos de decadencia. Hay veces que dependen de la mera voluntad de la clientela, que considera que el negocio ya no vende un producto necesario. Pero es lógico que antes de claudicar y de echar el cierre los propietarios quieran salvarlo.
En el caso de este peculiar negocio familiar que es la monarquía (por aquello de que el título se hereda de padres a hijos) está claro que se encuentra en un periodo de pérdida de clientes. Los hay que sin duda alguna defienden otro modelo de negocio, o de Estado; los hay que, habiendo sido fieles a eso que se dio en llamar el Juancarlismo, no entienden hoy por qué el viejo patrón no reconoce en su hijo un sustituto con más cualidades para lidiar con este complicado presente. Mientras al Príncipe se le aprecia cada vez mayor desenvoltura en su labor diplomática, al Rey se le advierten unas dificultades físicas que agrían su carácter y desconciertan al público. No sé qué asesor le habrá aconsejado al Rey que el antídoto de la impopularidad es la sobreactuación, quien sea se equivoca. O se equivoca él mismo. O se equivoca el Príncipe por no tener el valor de tomar a su padre del brazo y llevarlo hasta ese rincón privilegiado donde todo viejo patrón observa el curso de los nuevos tiempos. Si no lo remedian pronto, perderán la cada más exigua clientela y al Príncipe solo le quedará la opción de presentarse como candidato a la presidencia de la III República, que tampoco está mal.










ASÍ SON LOS NUEVOS EMPLEOS

Los recién contratados relatan su experiencia laboral: trabajos sin cualificación, a tiempo parcial y obligados a cambiar de empresa cada poco tiempo
Un camarero, en un bar de A Coruña / gabriel tizón
Desde el mostrador, Manuel echa un vistazo a la terraza, verifica que no falten tapas en la única mesa ocupada, y se pone a llenar neveras. Aún no son las diez de la noche, el termómetro sigue en 20 grados pero es domingo y septiembre, y ya empieza a escasear el personal. Tanto dentro como fuera de la barra de esta cafetería-restaurante de Portosín (A Coruña), el típico establecimiento a pie de playa que vive del turismo veraniego. “El resto del año, esto es un desierto”. Recurre a la lógica de las matemáticas para explicar el ligero descenso del paro en agosto. Con 3.578 desempleados menos, Galicia es la tercera comunidad donde más bajó. “En invierno, los bares que solían tener uno o dos empleados fijos ya solo funcionan con uno o ninguno. Y claro, al llegar julio, hace falta la gente que antes tenían todo el año más los extras. ¡Por eso suben las contrataciones!”. Pero ya volverán a bajar, augura.
 Protésico dental de formación, Manuel Rodríguez tiene 45 años, “edad crítica” en el mercado laboral, y lleva ya más de dos consiguiendo sólo “picotear” contratos de temporada. Tras dos meses a jornada completa y uno, éste, solo los fines de semana, le toca en octubre apuntarse de nuevo como demandante de empleo “en lo que sea” y tratar de estirar lo ganado en verano. Soltero, sin hijos y viviendo de nuevo en casa de sus padres, Manuel, tras dos décadas como camarero en Galicia y Canarias y un lustro en el sector de la construcción responde al perfil laboral mayoritario, aunque no aparece así en las estadísticas: “Parado eventual”. Los contratos temporales están al orden del día: fueron 60.962 de los 64.673 registrados en agosto. “Menos mal que trabajamos tantas horas que ni tiempo hubo para gastarse el sueldo”, ironiza Manuel. “Las condiciones salariales son aceptables”, dice, 1.200 euros netos al mes. Pero con una jornada de 12 horas diarias de media. Abundan en la hostelería y el comercio los contratos “a tiempo parcial”. “Aunque luego, ya se sabe, el horario es a la carta”.
Camareros asalariados, seguido de vendedores en tiendas y almacenes, encabezan, y con mucha diferencia sobre el resto, la lista de trabajos donde más se contrata en estos años de precariedad y escasez laboral. Pero en el pequeño comercio, resistir como se pueda es la consigna y ya no se cubren bajas o vacaciones durante las temporadas de rebajas. Que ahora pueden ser en cualquier época del año. Solo lo siguen haciendo las grandes cadenas de ropa como Inditex. En su sede central de Arteixo, “la crisis no se nota en el almacén, el trabajo sale este año por las orejas y hay más contrataciones temporales que nunca”, explica el delegado sindical de la CIG Roberto Pérez. Acaban de renovar en el departamento de logística a 220 eventuales, apuntados en una lista de personal previsto para cubrir vacantes de la plantilla fija, unos 900 trabajadores. Hay temporales que llevan años así, incluso a veces, durante nueve de doce meses. “Quema mucho la incertidumbre, no saber si este mes vas o no a trabajar. Mi vida es un caos con tanta temporalidad”, se queja una veterana. Como muchos en su situación, pide quedar en el anonimato. Cunde el temor “a que no te vuelvan a coger”. “Ser eventual quema sobre todo por la situación que vive el país”, razona su compañera Tatiana de Andrés. Acaba de renovar hasta noviembre el contrato firmado en julio. “Fuera tampoco hay nada, solo picoteos, y ni de coña se gana en siete meses al año lo que cobramos en Zara Logística”, subraya. Las condiciones laborales, idénticas a los fijos, son “buenísimas, con pluses por todas partes y cobrando las horas extras”. La mujer, de 37 años, lleva tres de eventual, desde su llegada A Coruña y tras dejar su puesto fijo “pero sin opción a traslado” en Inditex en Madrid.
Tatiana está agradecida por poder vivir de un trabajo que le “encanta”. No es habitual entre los miles de temporales. “Maldita crisis, llevo dos años sin poder trabajar en lo mío”, lamenta Javier, arquitecto técnico de 29 años y dos encadenando contratos “de fin de obra” en tareas administrativas. Escanea y archiva documentación estos días para una firma coruñesa. Apuntado en empresas de trabajo temporal, “porque hay más movimiento y garantizan que te paguen las horas extras”, la recesión le pilló terminando la carrera. Seis meses tardó en cerrar su empresa. Desde 2011, solo le salieron dos posibles ofertas como aparejador pero no prosperaron. Pese a todo, dice que está “supercontento”. Los contratos temporales, con una media mensual de 850 euros netos, “lejos de los 1.300” que ganaba ejerciendo su profesión, tienen sus ventajas: pudo “gastar solo” parte del año de subsidio del paro que ha cotizado, vive independiente de sus padres y tiene tiempo para estudiar. Acaba de obtener el postgrado. Medita intentarlo por su cuenta: “Me doy otro año más de límite”.
María, 24 años, tampoco pide más: “Ir tirando hasta encontrar en lo mío”. Aspira a ser trabajadora social. Pero tuvo que interrumpir la carrera en Santiago, hace dos años: “Subieron las tasas y en mi casa fue imposible asumir ese gasto”. Desde entonces, se buscó la vida: prácticas y dos meses de contrato en la Cocina Económica, un mes en otra entidad social, dos en un restaurante y otros tantos en “una cafetería con menú del día”. Añade los “dos días” que aguantó de comercial para una compañía telefónica. “Las condiciones eran horribles, y no pagaban”. Ahora María acaba de encontrar trabajo, y también su novio, con el que convive en el bajo de la casa unifamiliar de sus padres. Ella, después de tres meses en primavera de comercial para una aseguradora, con contrato y un mínimo salarial fijo, atiende sábados y domingos una panadería-cafetería. “No es a lo que aspiro, pero aprendí un nuevo oficio, me tratan superbien, y para ir tirando, está genial”. Su pareja lleva la mitad de sus 31 años siendo albañil. La crisis lo convirtió en parado de larga duración. Hasta que en junio se estrenó como camarero en un bar cercano. El contrato, inicialmente solo de verano, fue prorrogado para cubrir la baja de su única compañera. "Está encantadísimo, es un trabajo real, con su sueldo, horarios y libranzas", se maravilla María.