El personal del
Hospital Alcorcón se "entera de todo el asunto por la televisión y los
mensajes de móvil"
Martes, 7 de octubre de 2014
REDACCIÓN
CANARIAS-SEMANAL.ORG.- Una
auxiliar de enfermería que atendió en el hospital
Carlos III de Madrid al misionero Manuel García Viejo,
fallecido el pasado 25 de septiembre por ébola, se ha convertido en la primera
contagiada por este virus fuera de África. Así lo han confirmado fuentes
sanitarias, que han avanzado que se ha convocado un gabinete de crisis para
analizar este primer contagio en España y han detallado que la mujer se
encuentra ingresada en el hospital madrileño de Alcorcón.
LA INFECTADA PRESENTÓ
SÍNTOMAS DE LA ENFERMEDAD Y LA DEJARON QUE SIGUIERA HACIENDO VIDA NORMAL
La ministra de
Sanidad, Ana Mato,
manifestó al respecto que "estamos
trabajando para averiguar la fuente de contagio y si se siguieron estrictamente
los protocolos". "Tengan la certeza de que se están tomando todas las
medidas necesarias para garantizar la seguridad de toda la
población" -añadió la ministra.
Los hechos denunciados
por los propios sanitarios y lo que hasta el momento se ha podido conocer de
este caso, sin embargo, no contribuyen a generar la tranquilidad que la
principal responsable del ministerio pretendió transmitir con su mensaje
institucional.
La auxiliar de
enfermería infectada entró en dos ocasiones en la habitación del hospital
Carlos III donde permanecía el sacerdote García
Viejo. Una para atenderlo y otra para recoger material tras el
fallecimiento del misionero el 25 de septiembre. Una vez terminado este
servicio se marchó de vacaciones. El 30 de septiembre se le detectaron síntomas como “fiebre y astenia".
No obstante, no fue hasta el 5 de octubre cuando, al encontrarse peor,
fue atendida por los servicios del SUMMA 112. Durante este tiempo no estuvo
aislada y siguió con
su "vida normal", según ha reconocido el director
general de Atención Primaria de Madrid, Antonio
Alemany.
Solamente ahora,
las autoridades sanitarias afirman que están "haciendo
una lista de los contactos" que esta técnica y su marido han
mantenido desde que dejó de trabajar. Aunque no han especificado dónde estuvo
el matrimonio durante sus días de descanso. Sobre la manera concreta en que la
enferma contrajo la enfermedad, el ministerio de Sanidad tampoco tiene
respuestas.
Por su parte,
trabajadores de la Fundación
Hospital Alcorcón, donde la mujer permanece ingresada, se han
quejado de estar "enterándose
de todo el asunto por la televisión y los mensajes de móvil",
ya que "no están
recibiendo ninguna información". Circunstancia que ha
contribuido a provocar mayor inquietud entre el personal de este centro.
CRÓNICA DE UN
CONTAGIO ANUNCIADO
Lo sucedido con este caso
de contagio parece venir a corroborar las advertencias efectuadas, de forma
reiterada, por los profesionales del sector.
A comienzos del pasado
mes de agosto, la Coordinadora
contra la privatización de la Sanidad de Madrid (CASMadrid) calificaba
la repatriación del primer misionero español contagiado de ébola como "una grave
irresponsabilidad", asegurando que la medida lógica a
adoptar habría sido "implicarse
en la lucha contra la epidemia, enviando a la zona ayuda humanitaria a través
de los equipos médicos necesarios".
"Ante la naturaleza altamente
contagiosa y muy letal de la cepa Ébola-Zaire, responsable de la actual
epidemia, importar de forma premeditada lo que ya es el primer caso de la
enfermedad en el Estado español (y en Europa), somete a un riesgo absolutamente
injustificado a las trabajadoras y trabajadores del Hospital Carlos III y en
general, a toda la población" - afirmaban en lo que ha
terminado por convertirse en un negro pronóstico hecho realidad.
Del mismo modo, desde CAS-Madrid sostenían
que "el traslado del
enfermo había puesto en evidencia la insensatez de las decisiones tomadas por
la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid al cerrar las instalaciones
que hacían del Hospital Carlos III el centro de referencia a nivel estatal para
alertas de pandemias".
Unos días después,
el personal de enfermería de los servicios de Urgencias e Intensivos del
Hospital La Paz presentaba una denuncia ante el juez de Guardia de los Juzgados
de Plaza Castilla de Madrid, en relación a la designación del citado hospital
como centro de referencia para la detección, cribado y tratamiento de posibles
casos de ébola, en lugar del Carlos III.
Pero las
profesionales sanitarias no solo alertaban de que "La Paz no estaba preparada para hacer frente” a
esta enfermedad. Además, hacían público que "ante la nefasta gestión generada
por la activación de la alerta por el virus del ébola",
"no se sentían
capacitadas para atender con las garantías suficientes a posibles casos
de ébola”,
"por
la falta de información y formación adecuada al respecto y por la carencia de
recursos y desconocimiento de protocolos".
Esta falta de la más
elemental previsión ante una amenaza como la que implica la mortal enfermedad
infecciosa -según las enfermeras - "no solo ponía en peligro Ia seguridad y la salud de
los profesionales, sino que podía ser un problema de salud pública para el
resto de la población"
Fuente: www.canarias-semanal.org
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