Tras iniciar los trámites para la retirada
del título de Alcalde Perpetuo, el Ayuntamiento de Barbate comienza a retirar
los símbolos del dictador presentes en la localidad, como el escudo de madera
que presidía el Salón de Plenos. La futura ley de memoria andaluza dará 18
meses para eliminarlos
Joaquín Fernández / 16 mar
2014
Con escudo y sin escudo.// LUIS
ROSSI
Hace unas semanas, el Ayuntamiento de Barbate (Cádiz) inició los trámites
para retirar al dictador el nombramiento de Alcalde Honorario y Perpetuo de la
localidad, un título concedido en 1970 por el entonces regidor Diego López
Barrera. A pesar de esta iniciativa, Franco seguía teniendo presencia en el
municipio: presidía el Salón de Plenos y la fachada del Ayuntamiento de la
localidad. Ahora, el propio equipo de Gobierno ha comenzado a retirar todos
estos vestigios, para decir adiós definitivamente al dictador.
Un adiós obligado en unos meses. En cuanto se apruebe la ley de memoria
andaluza, la Junta dará un plazo de 18 meses para que los símbolos franquistas
sean retirados -también en los edificios privados con proyección a un espacio o
uso público. En Barbate todavía quedan vestigios de la época. “No teníamos
conocimiento del título ni de muchos símbolos que seguían presentes hasta que
no publicó la información el medio digital Heraldo de Barbate“, explica el alcalde de
la localidad, Rafael Quirós (PSOE), tras dar a conocer la retirada del escudo
de madera que presidía hasta hace pocos días el Salón de Plenos.
El alcalde explica que en estos días han comenzado a retirar placas y
símbolos que estaban presentes en varias fachadas de edificios del municipio. Quirós
reconoce que han sido los propios vecinos los que han avisado tras conocer las
informaciones. Asimismo, afirma que el escudo que preside la parte más alta del
Ayuntamiento se retirará “una vez que se pinte y reforme la fachada”. De
todas formas, el propio Consistorio reconoció hace unos meses que estos
recuerdos de la época se mantenían expuestos debido al alto coste que suponía
quitarlos.
Pero estos símbolos deberán ser retirados de forma voluntaria. Si no es
así, la Junta incoará de oficio el procedimiento y, si tampoco así se retiran
en el plazo establecido, será la Junta la que pueda hacerlo de manera
subsidiaria. Incumplir la orden de retirada, tipificado como infracción grave,
puede conllevar multas de entre 2.001 a 10.000 euros. En el anteproyecto se
expone, además, que la Junta no concederá ningún tipo de subvención o ayuda a
las personas físicas y las entidades públicas y privadas que hayan sido
sancionadas por mantener estos símbolos o por cualquier circunstancia que
atente, alente o tolere prácticas en contra de la memoria democrática.
Estos recuerdos no quedarán en el olvido en el municipio. En el Pleno
ordinario de Barbate correspondiente al mes de marzo, los partidos de la
oposición, concretamente el Partido Popular, solicitó al equipo de Gobierno
que los símbolos que se eliminen “no se tiren ni se rompan” para que se guarden
como recuerdo de la historia de la localidad. El alcalde, Rafael Quirós, ha
comunicado que aceptaron la propuesta.
Casi 40 años después de su muerte, Franco sigue teniendo presencia en la
localidad. Calles, símbolos y títulos, como el premio de ‘Medalla de Oro,
Platino y Brillantes’ que todavía sigue vigente. Poco a poco se inicia la
definitiva despedida, aunque cuatro décadas más tarde.
Fuente: http://www.andalucesdiario.es/
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